Carles Marco pasó de puntillas por este tempranero liderato al que se ha alzado el Unión Financiera y apostó por tener tranquilidad y pensar en el siguiente partido, que llega ya el miércoles, en La Coruña. "Mañana (por hoy) a trabajar, que el miércoles nos espera un rival durísimo", dijo el entrenador del equipo ovetense nada más comenzar la rueda de prensa posterior a la gran victoria que lograron los suyos frente al Iraurgi.

Aunque prudente, al entrenador de los ovetenses se le notó satisfecho con lo que habían hecho los suyos en el primer partido de la temporada en Pumarín: "Hemos empezado bien, sabiendo lo que había que hacer en cada momento, con muy buena energía, jugando mejor al baloncesto de lo que hicimos en pretemporada y en el primer partido de liga". También reconoció el bajón que sufrieron los suyos en el segundo parcial: "En el segundo cuarto hemos seguido cuatro o cinco minutos con la misma dinámica, hasta que no si hemos desenchufado o el haber estado acertados de cara a canasta no ha hecho bajar un pelín nuestra intensidad. Ellos se han puesto por delante, gracias en parte a nuestras dudas". Pero la reacción fue la adecuada: "Hemos salido en el tercer y el cuarto cuarto con la energía necesaria".

El técnico se mostró también satisfecho con el trabajo que viene realizando una plantilla muy renovada y que está avanzado a mucha velocidad: "De lo que estoy más satisfecho es del trabajo que estamos haciendo hasta ahora. Como cada año somos mucha gente nueva, gente a la que le falta competir, que el año pasado jugó poco en sus equipos. Estamos, como muchos equipos, verdes, aunque hayamos trabajado mucho, pero evidentemente progresar ganando te hacer avanzar mucho más rápido".

También es consciente Marco de que la afición sueña con volver a ver los éxitos del equipo ovetense: "Antes de hacer el equipo ya había mucha gente que tenía las expectativas altas porque el año pasado ganamos la Copa. Aceptamos el reto de intentar hacerlo lo mejor posible, de competir, de agradar aquí a nuestros aficionados, de ganar muchos partidos en casa". Pero ellos han de ser prudentes: "Vamos a tener los pies en el suelo. Estoy encantado de que la gente se ilusione con nosotros, como sucedió el año pasado, es fantástico, pero nosotros debemos ir poco a poco".