Lo ha vuelto a hacer. El leonés Manuel Merillas se impuso ayer en la 15º edición de la Travesera Integral de los Picos de Europa, considerada como una de las carreras de montaña más duras de Europa al acumular 6.500 metros de desnivel. El campeón completó los 74 kilómetros que separan Covadonga de Arenas de Cabrales en doce horas y un minuto. Ya conocía bien la prueba: estableció récord absoluto en la misma en 2015 con un tiempo de diez horas y cuarenta y dos minutos. "Para mí es un sueño volver a ganar en los Picos porque son casi como mi segunda casa. Los últimos kilómetros fueron muy duros. El barro y la nieve fueron lo peor", aseguró tras pasar por meta apoyado en dos bastones de montaña hechos con bambú, regalo de su padre y casi un amuleto que no falta en sus competiciones.
Segundo fue el guipuzcoano Ion Aziroz (12:34:20), que participaba por primera vez en la Travesera. "He sufrido mucho por la nieve, pero también he disfrutado. Sin duda repetiré", señaló. En tercer lugar quedó el cangués Antonio Blanco, aunque entró prácticamente a la vez que Aziroz. El deportista cangués no es nuevo en el podio: quedó primero en la Travesera de 2016, en la que Merillas no participó por una lesión. "En la primera parte hasta los Lagos había mucho barro, que obligaba a dar un paso para adelante y dos para atrás. Otro punto crítico fue la bajada de Collada Bonita, donde las piernas se resintieron", explicó.
Aitziber Osinalde conquistó el primer puesto de la categoría femenina con una marca de 15:30:04 y fue trigésimo quinta en la clasificación general. La segunda corredora en pasar por meta fue Claudia Gutiérrez (16:12:34) y Marta Escudero se apoderó de la tercera posición con un tiempo de 16:42:23.
Organizadores de la prueba como Benjamín Cabo destacaron la dureza de la misma. "En estos quince años nunca había habido tanta nieve arriba y en las partes bajas la humedad y el barro hizo que corrieran desde el minuto uno con los playeros mojados", explicó. Cabo destacó además el hecho de que el recorrido se viera ampliado en ochocientos metros. "Quisimos que la carrera pasara por la explanada de Covadonga para hacer un guiño a los tres centenarios que confluyen allí este año: el primer centenario de la creación del Parque Nacional de la Montaña de Covadonga, el decimotercer centenario de los orígenes del Reino de Asturias y el primer centenario de la coronación canónica de la Santina", explicó.
Un total de 450 titanes pusieron a prueba sus límites en la Travesera, que arrancó a medianoche desde el Repelao y discurrió por lugares emblemáticos como la Vega del Enol y del Urriellu.
Toda la información de la prueba, galería de imágenes y clasificaciones COMPLETAS en:
