Bruselas, Agencias

«Es extremadamente importante que España profundice en las reformas estructurales, especialmente en la del sistema de pensiones y la del mercado laboral». La advertencia la lanzó ayer el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, quien aseguró que ahondar en estas reformas hará que el país goce de una mayor credibilidad en los mercados y que se alejen las turbulencias económicas que lo acechan. Mientras el presidente de la entidad europea pedía más esfuerzos a España, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, comparaba la crisis con una carrera de rally en la que el país «está en la última curva».

Durante una charla sobre los bancos centrales de América Latina, Trichet calificó de «esencial» la reforma laboral y la de las pensiones para la prosperidad de la economía española, porque, afirmó, actúan de catalizador para potenciar el crecimiento. Patronal y sindicatos han denunciado últimamente que la reforma laboral no está surtiendo ningún efecto positivo. Según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), los costes laborales se moderaron en España en el tercer trimestre del año, antes de la entrada en pleno vigor de la citada reforma. El coste por hora trabajada bajó un 2%, el primer descenso del año después de que estos costes se hubieran incrementado en el primer y segundo trimestres.

El BCE ha revisado al alza sus previsiones económicas desde que se inició la recuperación económica, que la entidad europea sitúa en el tercer trimestre de 2009. Trichet reconoció que España «es uno de los países europeos cuya economía se ha comportado mejor de lo previsto» a lo largo de los últimos meses.

Menos incisivo sobre la necesidad de más reformas se mostró el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, quien ayer aseguró que Zapatero «ha cogido el toro por los cuernos» con sus medidas para reducir el déficit público, hacer frente a la crisis de la deuda y permitir el crecimiento de la economía. Tras recoger un premio que le concedió el Foro Nueva Economía, el belga Van Rompuy alabó el «coraje» de Zapatero. El Presidente español comparó la crisis económica con una carrera de rally: «La lucha contra esta crisis sea asemeja a una sinuosa y estrecha carretera de montaña: apenas hemos dejado atrás la ultima curva, conjurando el riesgo de derrapar, nos encontramos con el peligro de la curva siguiente», destacó José Luis Rodríguez Zapatero. Y añadió que durante esta crisis «lo que duele en Atenas daña a Amsterdam, y si Barcelona florece, Berlín prospera».