Oviedo

Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) es una de las mayores empresas de Argentina (da trabajo a 4.000 personas de forma directa y a 16.000 de manera indirecta) y aporta un tercio de la producción de hidrocarburos del país, donde cuenta con presencia física en las 24 provincias del país. Pero superior es el peso que la filial tiene para su matriz, Repsol. La compañía argentina representa algo más del 30% de la producción total de hidrocarburos de la española y alrededor del 40% de sus reservas.

Menor es el peso en la cuenta de resultados. La filial argentina cerró el año pasado con un beneficio de explotación de 1.231 millones de euros, lo que supone el 25% del total de la multinacional. Repsol se lanzó a la compra de la empresa sudamericana como parte de su estrategia de internalización. La española adquirió a la argentina en 1999 por 13.437 millones de euros, más de dos billones de las antiguas pesetas. Comenzó comprando un 15%, para después lanzar una opa. Por aquel entonces, según denunció la propia Repsol, YPF era una compañía que año tras año daba pérdidas. En su día, la adquisición ya había levantado muchos recelos en Argentina.

Durante el año pasado YPF produjo diariamente unos 472.000 barriles diarios, aproximadamente la mitad de los que produjo Repsol.

El anuncio del Gobierno argentino se produce sólo unos meses después de que YPF anunciara el descubrimiento de un gigantesco yacimiento en una zona denominada Vaca Muerta, que tendría capacidad para sacar al país del déficit energético en el que se encuentra sumergido. Repsol llegó a anunciar el descubrimiento como el mayor hallazgo de hidrocarburos de su historia.