La economía estadounidense creó 173.000 empleos durante el pasado mes de agosto, lo que permitió que la tasa de paro bajara al 5,1%, la más baja desde abril de 2008, según informó ayer el Departamento de Trabajo de Estados Unidos. No obstante, a pesar de la caída de la tasa de paro, la cifra de creación de empleo se ha situado muy por debajo de las expectativas del mercado, que estimaba un dato cercano a los 210.000 empleos, lo que puede suponer un freno a las expectativas de una inminente subida de tipos de interés en Estados Unidos, que ya se habían enfriado ante las turbulencias generadas por la desaceleración de China y otros países emergentes.

La incerticumbre sobre la decisión de la Reserva Federal, que dirige Janet Yellen, aumentó la volatilidad en los mercados y provocó caídas en las principales bolsas europeas. El Ibex 35 cerró la sesión de ayer con un retroceso del 2,2%, lo que llevó al selectivo a situarse por debajo de los 9.900 enteros (9.821,8) tras la apertura a la baja de Wall Street una vez publicados los datos de desempleo del mes de agosto en Estados Unidos. De este modo, el selectivo acumula una caída semanal del 5,13%.

Una vez superado el "efecto Draghi" (el anuncio de que el BCE tomará nuevas medidas monetarias si se recrudece la crisis de los países emergentes), las principales bolsas del Viejo Continente se han sumido en pérdidas superiores al 2%, con París perdiendo un 2,76%, Francfort un 2,62% y Londres un 2,34%. Los mercados anticiparon así un posible retraso de la subida de tipos de interés en Estados Unidos.