La Comisión Europea ha reclamado a las autoridades belgas que recuperen cerca de 700 millones de euros en ayudas públicas ilegales concedidos a 35 multinacionales durante los últimos diez años, a través de un sistema que permitió a estas empresas establecidas en Bélgica deducirse de la base del impuesto de sociedades los denominados "beneficios excesivos". A juicio del Ejecutivo comunitario, el régimen que exoneró a las multinacionales de tributar en Bélgica parte de sus beneficios generados en su país contribuyó a una "distorsión muy grave" para la competencia en el mercado único.