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ANDRÉS ROMERO PEÑA | Director general de la aseguradora Santalucía

"El seguro de decesos crece cada año, los jóvenes ven que es útil al morir un familiar"

"En el futuro las pensiones públicas estarán garantizadas, pero habrá que complementarlas con planes privados"

Andrés Romero, en Oviedo. JULIÁN RUS

Los asturianos están muy bien asegurados para el momento de la muerte. Más del 60% de la población tiene un seguro de decesos, aquel cuya póliza se va alimentando poco a poco en vida, para evitarse disgustos añadidos cuando al asegurado le llegue la ahora. De la fuerte implantación de este seguro en la región tiene bastante que ver la compañía Santalucía, que cuenta con un 53% de cuota de mercado en decesos, y que ahora busca crecer por otras vías. El director general de la empresa, el extremeño Andrés Romero Peña, mantuvo esta semana una reunión con su equipo de trabajo en el Principado, donde acaban de estrenar unas nuevas instalaciones en Oviedo. En las siguientes líneas Romero repasa alguno de los principales retos de la empresa y sus planes de futuro.

- ¿Qué conclusiones saca tras reunirse con su equipo en Asturias?

-Dentro de la estrategia del grupo, una vez cada mes, tenemos diferentes encuentros con las entidades que forman Santalucía. Lo que se persigue es explicar cuáles son los retos que tiene la entidad y retroalimentarnos. Es importante que tengamos una estrategia pero, al final, detrás de toda empresa hay personas y tienen que opinar.

- ¿Cuáles son esos retos a los que se enfrentan?

-Tradicionalmente hemos apostado por los seguros de deceso o los de hogar, que están muy orientados al núcleo familiar, y estamos desarrollando nuevos modelos de negocio con los seguros de vida, tras la adquisición de Aviva. También estamos saliendo fuera de España a Portugal y Latinoamérica.

- Tienen una posición hegemónica en cuota de mercado del seguro de decesos en Asturias.

-Es uno de los motores, pero el negocio de seguros de vida pasará a ser el 48% de nuestra actividad tras la integración de Aviva. Estamos orgullosos de lo que hemos construido hasta aquí, pero hay que diversificar y dar a esos siete millones de clientes que tenemos más alternativas.

- Son unos seguros muy ligados a las familias, pero la estructura familiar ha cambiado mucho durante estos últimos años ¿Cómo se han adaptado?

-El seguro en general es un negocio que necesariamente tiene que adaptarse a los cambios de la sociedad y a la composición de las familias. El de decesos y los de hogar lo han hecho, los de vida lo está haciendo.

- ¿Tiene tirón el seguro de decesos entre los jóvenes?

-Es un seguro que sigue creciendo año a año en cuota de mercado. Quizá una persona joven no ve las bondades de un seguro de estas características porque el hecho del fallecimiento lo ve lejano. Pero cuando muere una persona próxima descubres su utilidad y es en ese momento cuando se empieza a comprobar que es necesario, que evita problemas y que aporta un servicio en un momento en el que no estás para eso. La banca o los nuevos operadores que entran en el negocio están mostrando un interés creciente en este tipo de pólizas. Son seguros que tienen una duración de 25 ó 30 años, y vincularte con un cliente durante tanto tiempo es muy difícil.

- Acaban de cerrar la compra del negocio de Aviva en España ¿Qué supone esta operación?

-Al ser una actividad regulada aún se necesita de una autorización administrativa, además de la dirección general de Seguros, de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Comisión Nacional de Competencia (CNMC). Para nosotros esto supone tener una nueva dimensión. Casi duplicaremos el volumen de negocio de la entidad, multiplicaremos por tres los activos bajo gestión, e incorporaremos a nuevo personal que aportará valor y un nuevo punto de vista del negocio.

- ¿Cómo ven las aseguradoras el futuro del sistema de pensiones?

-Las aseguradoras debemos de jugar un papel de complementariedad de las pensiones. El ciudadano tiene que generar su ahorro futuro a través del sistema público, pero el ahorro privado tiene que favorecer ese complemento necesario e imprescindible que va a garantizar que al final de la vida laboral se pueda tener acceso a unos servicios lo más parecidos posible a los que se tenía cuando se estaba en activo.

- Pero el porcentaje de quienes contratan esos productos es todavía pequeño.

-España tiene aún recorrido. Nuestra alta dependencia de un sistema público que garantizaba una cobertura casi absoluta de las pensiones es un punto de partida diferente al de otros países de nuestro entorno. Lo que ahora mismo se está haciendo es poniendo el foco en que en el futuro no se trata de buscar sistemas alternativos o sustitutivos sino complementarios. Vamos a tener unas pensiones que estarán garantizadas por el sistema público pero tenemos que darnos cuenta de que si queremos tener un sistema de ahorro que nos permita mantener una actividad lo más parecida a la que llevábamos durante la vida activa tendremos que hacer un esfuerzo.

- ¿Cómo están afrontando su expansión internacional?

-Hemos empezado por establecer una alianza, una "joint venture", con Fidelidade en Portugal de la que estamos muy satisfechos porque está funcionando muy bien. Empezamos a trabajar con ellos a finales del año pasado para el desarrollo del seguro de decesos en ese país. En Portugal sucedía que el Estado sufragaba una parte importante del sepelio y el servicio funerario pero la crisis provocó, por restricciones de la propia "Troika", que se limitaran este tipo de ayudas. En ese momento este seguro tiene allí un relato, una historia y permite que el ciudadano pueda ahorrar. Y está funcionando bien. Fuera de Europa estamos trabajando ya en Colombia, donde hemos firmado un acuerdo con Fundación Social, para, también, el desarrollo del seguro de decesos. Estamos viendo el mercado chileno, el peruano y en México hemos empezado, a través de Ballesol, en el negocio de la tercera edad. Allí, de la mano de operadores locales, también hay un mercado para el desarrollo del seguro que nos parece muy interesante.

- ¿Qué supone Asturias para Santalucía?

-Es uno de nuestros orígenes. Santalucía fue fundada en el año 1922 por unos socios que eran en parte gallegos y en parte asturianos, y es uno de los mercados más sobresaliente para nosotros. El Principado es un buque insignia para la empresa.

- Acaban de estrenar unas nuevas instalaciones en Oviedo.

-Hemos concentrado en unas oficinas la gestión de siniestros y de distribución telefónica. Eso mejora la introducción de nuevas tecnologías, nuevas capacidades, nos da mayor eficiencia y mejora la atención al cliente.

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