Los trabajadores de la mina de Cerredo, en Degaña, perteneciente a la Compañía Minera Asturleonesa, se concentraron este lunes ante la térmica de Compostilla (León), para denunciar que la empresa eléctrica Endesa lleva semanas sin comprar carbón de la explotación asturiana, decisión que al está llevando a una situación “límite”. Las movilizaciones se repetirán durante toda esta semana.

El comité de empresa, con mayoría sindical de USO, ha alertado sobre “la situación desesperada que vivimos los 190 trabajadores”.

Desde que que la nueva administración concursal se ha hecho cargo de la compañía, la central de Endesa no ha comprado un solo gramo de carbón de Asturleonesa, como sí venía haciéndolo anteriormente, asegura la plantilla.

“Nuestra situación es ahora mismo la crónica de una muerte anunciada, con un dueño huido de la justicia por sus múltiples delitos contra la Hacienda Pública, el adeudo de varias nóminas a trabajadores y a proveedores, y una nueva gerencia con buenas intenciones pero a quien nuestro tradicional y ya único cliente le está haciendo el vacío”, ha expuesto la representación de los trabajadores en un comunicado.

El propietario de la mina, el empresario Rodolfo Cachero, está en busca y captura desde el mes de julio a raíz de que incumpliera una orden de ingreso en prisión para cumplir condena por ocho delitos fiscales cometidos en mina Jovesa, otra explotación de la que fue titular en el concejo de Aller y que cerró hace años. A raíz de la situación procesal de Cachero, el juez mercantil decidió apartar al empresario de la gestión y encomendársela a los administradores concursales. Asturleonesa está en concurso voluntario de acreedores desde inicios de este año por deudas con Hacienda, la Seguridad Social, los trabajadores y los proveedores.