El Tribunal Constitucional considera que deben ser los servicios de empleo de las comunidades autónomas quienes gestionen la ayuda de 426 euros para parados de larga duración -el Programa de Activación para el Empleo (PAE)-, según una sentencia que ha publicado este miércoles, en la que anula, por tanto, los artículos del decreto del PAE que hacen referencia a la gestión por parte del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).

En todo caso, quienes estén cobrando esta cantidad lo seguirán haciendo, dado que la sentencia no afecta "a la subsistencia y a la continuación en la concesión de las ayudas". La diferencia a partir de ahora es que la gestión dependerá a partir de ahora de los gobiernos autonómicos.

En la citada sentencia, el TC afirma que la atribución que la normativa reguladora del PAE efectúa al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) para que sea éste el encargado de ejercer las funciones de concesión y pago de esta ayuda económica debe considerarse como "inconstitucional y nula por corresponder a la competencia de los servicios de empleo de las comunidades autónomas".

El TC, que responde de esta forma al recurso planteado por el Gobierno vasco al entender que el PAE invadía competencias autonómicas, ya se pronunció de forma similar respecto al Plan Prepara, al entender que centralizar en el SEPE la gestión de esta ayuda económica a desempleados contravenía el orden constitucional de distribución de competencias en materia de empleo.

De esta forma, el alto tribunal da la razón al Gobierno vasco, que en su recurso sostenía que las competencias para acordar la incorporación al PAE, así como las bajas y reincorporaciones al plan, o la financiación de la ayuda económica complementaria "ignoraban de forma absoluta" la competencia genérica de la comunidad autónoma del País Vasco en legislación laboral y la competencia concreta en materia de políticas activas y fomento del empleo, "conculcando el orden constitucional" de distribución de las competencias atribuidas a esa comunidad.

Se prorrogó en abril de 2017

El Gobierno prorrogó el pasado mes de abril, por segunda vez y hasta el 15 de abril de este año, el Programa de Activación para el Empleo dirigido a la reinserción laboral de los parados de larga duración con cargas familiares que hayan agotado todas las prestaciones y subsidios, y que contempla una ayuda de 426 euros mensuales para sus beneficiarios.

El Ejecutivo calculaba entonces que se beneficiarían de este programa 210.000 desempleados. En 2017, el programa contó con una dotación de 220 millones de euros y para este año están previsto un total de 337 millones.

Para solicitar esta ayuda, los desempleados de larga duración deben haber tenido un empleo anterior, estar inscritos como demandantes de empleo al menos nueve meses durante los 18 meses anteriores, buscar activamente un puesto de trabajo y haber consumido cualquier prestación un mes antes de pedir la ayuda.