La Fiscalía pidió ayer cadena perpetua para el ex dirigente etarra Mikel Carrera Sarobe, "Ata", por haber sido uno de los dos tiradores que el 16 de marzo de 2010 mataron al policía francés Jean-Serge Nérin, que se considera el último muerto de la organización terrorista. La fiscal Maryvonne Caillibotte justificó la máxima pena contra Carrera Sarobe también en tanto que dirigente terrorista como jefe militar de ETA, que ese día estaba al frente del comando que tras robar cinco coches en un concesionario mantuvo un tiroteo con una patrulla de policía en Villiers-en-Bière, al sur de París.

Caillibotte reclamó asimismo, ante el Tribunal de lo Criminal de París que juzga a seis miembros de la banda por esos hechos, penas que van de los 18 a los 30 años para el resto de los acusados.