Albina FERNÁNDEZ

Leorio quiere recuperar su patrimonio histórico y los vecinos ya se han puesto manos a la obra para conseguir la reconstrucción de la antigua iglesia románica de Santa María de Leorio, destruida en la guerra civil por un bombardeo y trasladada en parte al cementerio de la vecina parroquia de La Pedrera. Algunas de sus piezas, además, están colocadas en el panteón de la familia Rodríguez Sampedro, en cuyas cercanías se encuentra su palacio.

El presidente de la Asociación de Vecinos de Leorio e impulsor de la iniciativa, Andrés Avelino Cabranes, explicó que los condes de Rodríguez Sampedro «pactaron con el cura de La Pedrera el trasladar estas piezas a su panteón y las llevaron en un carro tirado por bueyes. Los condes, a cambio, cedieron más terrenos para ampliar el cementerio».

Los vecinos no se plantean el recuperar las piezas cedidas, pero sí que se reconstruya la primitiva iglesia en sus formas originales. Y para conseguirlo, la asociación vecinal se pondrá en contacto con la Consejería de Cultura y con el Arzobispado. «Cultura ya metió en su presupuesto la reconstrucción de otros edificios, y nosotros vamos a luchar por ello. Es un proyecto costoso que deberá de afrontarse en fases, pero lo importante es que se empiecen a consignar partidas», señaló el presidente vecinal.

Pero el proyecto es más ambicioso. La asociación quiere aprovechar la finca cercana a la primitiva iglesia para recuperar la tradicional fiesta «de prau» de la parroquia, que se celebraba en julio. «Los vecinos hicieron en Llantones una capilla donde celebramos la fiesta del Carmen, pero la idea es recuperar nuestras tradiciones», comentó Cabranes.

El presidente vecinal explicó que ahora es el momento oportuno para pedir la restitución del patrimonio histórico y cultural de la parroquia porque, explicó, «hasta ahora estuvimos plenamente dedicados a cubrir las necesidades más perentorias de la parroquia, pero una vez cubiertos los servicios básicos, es el momento de reclamar nuestro pasado y nuestras tradiciones».

El origen de la primitiva iglesia no está muy claro y hay dos pistas para ubicarlo en el tiempo. La primera es una lápida existente en la iglesia parroquial de San Andrés, próxima al cementerio y que se atribuye a la la primitiva iglesia de Santa María de Leorio, en cuya inscripción figura la era 89 de un siglo ignorado y que los expertos cifran en torno al año 1051 o, en cualquier caso, a finales del siglo once como máximo. No obstante, y ésta es la segunda pista, su construcción pudo ser de fecha bastante anterior, ya que la iglesia se cita en el falso testamento del rey asturiano Ordoño I, que nació en 821 y gobernó entre los años 850 y 866.

La antigua iglesia de Santa María de Leorio figura en las rutas turísticas de Gijón y entre los textos del románico asturiano. Se trata de un templo de pequeñas dimensiones, con nave única rematada en la cabecera por el ábside semicircular, ambas separadas por un arco triunfal de triple vuelta adornado con motivos vegetales y animales fantásticos, y se conservan solamente la portada y el ábside semicircular.

La sencilla portada original presenta triple arco apuntado y guardapolvo sin decorar; la parte baja de las impostas, en cambio, están decoradas con temas vegetales geometrizados.

El ábside conserva en su parte central una pequeña ventana rematada por arco de medio punto sin ornato que descansa sobre dos pequeñas columnas con capiteles labrados con decoración muy borrada. Los canecillos presentan una somera talla con motivos geométricos.