J. M. CEINOS

La plantilla del astillero privado Juliana (antes el público Izar Gijón) rechazó ayer, en una asamblea, que la construcción 535 de la factoría naval de El Natahoyo se traslade a Vigo, en concreto a Factorías Vulcano, empresa que en el año 2006 compró a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) Izar Gijón por 2,09 millones de euros.

La construcción 535 es uno de los cuatro buques sísmicos contratados en su día para ser construidos en Gijón. No obstante, Juliana ya perdió uno de ellos en beneficio del citado astillero vigués.

Tras la asamblea, Félix Magadán, máximo responsable del sindicato UGT en Juliana, señaló que de ninguna manera «vamos a permitir que se lleven la obra a Vigo». El sindicalista explicó que actualmente en Juliana se construyen (en distintas fases de obra: armamento, próxima botadura y corte) dos buques sísmicos y un cementador, este último para la compañía asturiana Tudela Veguín, aunque «si se llevasen la construcción número 535 a Vigo, en octubre próximo algunas secciones del astillero entrarían ya en subactividad», afirmó Félix Magadán.

Los sindicatos con representación en Juliana, UGT y CC OO, a través del comité de empresa, ya tienen solicitado el preaviso para una huelga de un mes de duración, a contar desde el próximo día 15 de julio, en el caso de que antes no vislumbren una solución que permita la continuidad del astillero.

Antes, no obstante, está previsto que se celebren reuniones con la sociedad privada Pequeños y Medianos Astilleros en Reconversión (Pymar), el próximo jueves, 10 de julio, y con la SEPI, el día 14 de julio.

En ambas reuniones se tratará sobre el plan industrial para Juliana 2008-2014, que presentó hace meses la empresa Vulcano, que preside Fernando Santodomingo Azpeitia.

El año pasado, Juliana tuvo unas pérdidas de 16,88 millones de euros antes de impuestos (5,47 millones se podrán recuperar por devoluciones de la Agencia Tributaria). A esta cifra se suma que en 2008 Juliana prevé unas pérdidas de otros 5,59 millones de euros (de los que podrá resarcirse en 1,68 por la Agencia Tributaria).

El plan industrial de Juliana también establece la incorporación de los 44 trabajadores excedentes de Naval Gijón (Nagisa), el otro astillero que queda en la bahía de Gijón, que cerrará tras el verano una vez terminada la construcción de su último encargo: un buque portacontenedores. De esta forma se pondrá punto final a un astillero fundado a finales del año 1984 tras la fusión de Marítima de El Musel y Dique Duro Felguera. Nagisa tiene una plantilla de un centenar de trabajadores.

El plan industrial 2008-2014 de Juliana incluye también la prejubilación de 115 trabajadores de este astillero, pero siempre si se obtienen ayudas de la Administración. Pero la empresa también aduce que no tiene fondos para acometer las inversiones que comprometió al adquirir el astillero a la SEPI y vincula su realización a recibir ayudas públicas.

El astillero se fundó, con el nombre de Sociedad Anónima Constructora Gijonesa, en el año 1900. Tiene actualmente una plantilla de 172 trabajadores, a los que hay que unir los de las empresas auxiliares.

En los últimos años como astillero público, en Juliana se acometieron importantes inversiones económicas para la modernización de sus instalaciones.