R. VALLE

El tráfico de vehículos registrado no será la única variable a tener en cuenta a la hora de concretar los pagos a la empresa que se haga cargo, mediante el sistema de peaje en la sombra, de la construcción de los nuevos accesos a la Zona de Actividades Logísticas e Industriales de Asturias (Zalia). El mismo sistema se seguirá en la AS-III entre Avilés y Langreo, para evitar problemas como los detectados en la AS-II entre Oviedo y Gijón, donde no se han cumplido las expectativas de la firma concesionaria ya que el número de vehículos que la usan es muy inferior al calculado en el contrato con la Administración.

El presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, adelantó ayer que el pliego de condiciones del contrato, que en breve saldrá a licitación, incluirá otras variables que puedan hacer atractiva la obra a los promotores privados.

«En el pliego se tendrá la precaución de que no sólo sean los tráficos quienes marquen el pago, sino una combinación de variables que faciliten una financiación adecuada y en condiciones para las empresas», explicó el presidente autonómico. Una de las opciones a barajar es la recuperación anual de un porcentaje de lo invertido por la empresa en el proyecto. Los nuevas conexiones con la Zalia, con un coste de 156 millones de euros, fueron defendidas ayer por Areces como prioritarias tanto por su relación con un nuevo espacio de expansión económica como por su capacidad de interconexión con el resto de la trama de autovías asturianas.

Por otro lado, Areces concretó que ya hay autorización oficial de la Unión Europea para certificar las obras de ampliación de El Musel el 31 de diciembre de este año, lo que garantiza el cumplimiento de los plazos de final de la obra.

ZALIA.

La zona logística:

La Zona de Actividades Logísticas e Industriales es un espacio de cuatro millones de metros cuadrados que se plantea como nuevo motor económico del Principado

Los accesos.

Doce nuevos kilómetros de autovía que enlazan con la Y y con la AS-II (Oviedo-Gijón)