Eloy MÉNDEZ
El futuro albergue de la ciudad recibió ayer «el visto bueno» de los representantes vecinales reunidos con la concejala de Servicios Sociales, Esperanza Fernández Puerta, para analizar las claves del proyecto en la sede de la Federación de Asociaciones de Vecinos (FAV) de la ciudad. La polémica suscitada por algunos residentes de los barrios de El Natahoyo y Moreda, que se oponen a la construcción del macrocentro en el antiguo solar de Suzuki y han creado la plataforma Villa de Ataulio para luchar contra los intereses municipales, quedó relegada a un segundo plano durante el encuentro. «Nos preocupamos sobre todo por conocer los detalles del edificio y, en general, la gente salió muy contenta», señaló la presidenta de la FAV, Teresa Prada.
En este sentido, los líderes de las diferentes asociaciones que acudieron a la cita coincidieron en señalar que se trata de una «infraestructura necesaria» para la ciudad. «Nos ha gustado el proyecto porque se va a hacer un bloque muy luminoso», dijo Prada, que también destacó que «es necesario hacer un esfuerzo para que todo el mundo acepte este tipo de centros». En este sentido, añadió que «la Cocina Económica está en el centro urbano y nunca he oído a nadie quejarse». Además, arrancó de Fernández Puerta el compromiso de que «se cumplirán todas las medidas de seguridad durante las obras y que podremos visitar el albergue cuando se abra para conocer de cerca su funcionamiento».
Por otra parte, la junta directiva de la FAV decidió ayer convocar la asamblea general ordinaria del colectivo para el próximo día 24 de junio, festividad de San Juan, a las 19.00 horas, en el salón de actos el Centro de Cultura Antiguo Instituto Jovellanos, para dar cabida «al mayor número posible» de asistentes.
