En pleno debate político sobre la reordenación del plan de vías y la reubicación de la estación intermodal, el equipo de gobierno de Foro dio ayer un paso más en el largo y complejo proceso administrativo que facilitará a la sociedad Gijón al Norte -integrada por el Ministerio de Fomento, el Principado de Asturias y Ayuntamiento de Gijón- poder poner a la venta las primeras parcelas liberadas de las vías del ferrocarril en el centro de la ciudad.
El proceso de comercialización de ese suelo se realizará, sin embargo, sin que aún se haya concretado el diseño final de la operación ferroviaria que pasa por ser una de las actuaciones urbanísticas más relevantes del futuro a medio y largo plazo en la ciudad. No hay que olvidar que las plusvalías por la venta de esos terrenos para la construcción de viviendas son el pilar de la financiación económica del proyecto, sea cual sea el diseño que se decida finalmente.
La Junta de Gobierno dio luz verde ayer a la aprobación definitiva de la reparcelación de la unidad de ejecución 1A del Plan Especial para la Integración del Ferrocarril en la ciudad. A esa reparcelación se le dio el visto bueno provisional en la Junta de Gobierno del 14 de julio. Ahora esta aprobación saldrá publicada en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) y después habrá que esperar un mes para que el acuerdo sea firme en vía administrativa.
Será en ese momento cuando se pueda presentar en el Registro de la Propiedad la certificación para que se inscriban las parcelas resultantes de la operación. Gijón al Norte, como sociedad propietaria del suelo, podrá entonces poner en marcha su comercialización, para financiar con el ingreso de la venta la intervención prevista.
El proyecto de reparcelación afecta a una superficie de 46.764 metros cuadrados que se ha dividido en dos parcelas. La H1, la más cercana al Humedal, da espacio a cuatro bloques, tiene una superficie de uso lucrativo de 5.085 metros y está tasada en 41,8 millones de euros. La H2, en el entorno del Museo del Ferrocarril, está tasada en 28,6 millones, tiene un uso lucrativo de 2.517 metros cuadrados y según el estudio de detalle en vigor acogería tres bloques de viviendas. La venta del suelo reportaría a Gijón al Norte, si el proceso se lleva a cabo según los planes previstos, unos ingresos de setenta millones de euros.
Todo ello según la actual planificación del plan de vías. Ahora sobre la mesa hay una propuesta del Ministerio de Fomento para desarrollar la estación intermodal soterrada en el entorno del Museo del Ferrocarril con la llegada de las vías bajo tierra desde la zona de Moreda. El plan tiene un coste estimado de 422 millones de euros y aún no ha pasado, siquiera, por el consejo de administración de Gijón al Norte, que debería reunirse en fechas próximas.
Fomento garantiza que el proyecto puede estar licitado el año que viene y acabadas las obras en 2019, según los planes que el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez-Pomar, comunicó la pasada semana a la alcaldesa, Carmen Moriyón, en una reunión celebrada en Madrid.
Las plusvalías siguen siendo la fórmula principal de financiación aunque también hay que contar con 34 millones de euros presupuestados para esta actuación por Fomento y el compromiso del Principado de asumir el conste de la construcción de la estación de autobuses prevista en el proyecto. El cambio de ubicación de la estación obligaría a modificar los planes para los bloques de viviendas diseñados en el planeamiento original.
Al tiempo que se avanza en el proceso de comercialización del terreno afectado se han iniciado las actuaciones de adecuación provisional de ese suelo como zona verde con pasos peatonales. La firma Ceyd se hizo con esa obra con una oferta de 450.000 euros sobre un precio de partida de 860.000. El proyecto de urbanización definitiva de los terrenos tiene un coste estimado de 3,3 millones.
