En una intervención complicada pero con final feliz, dos agentes de la Policía Local de Gijón evitaron en la madrugada de ayer el suicidio de un joven de 23 años que pretendía quitarse la vida lanzándose desde el puente de la carretera AS-248 situado sobre la ronda exterior de la ciudad. El suceso tuvo lugar a la una y media de la mañana. Fuentes municipales explicaron ayer que los funcionarios sujetaron el joven "en el momento preciso" antes de que cayera al vacío.

Un testigo de lo sucedido había avisado a los funcionarios poco antes de que se personara en la zona una patrulla que entabló conversación con el chico para intentar que bajara del puente. Al ver que no conseguían su objetivo, los agentes se acercaron al joven "disimuladamente" mientras seguían hablando con él. "En cuanto se encontraron a una distancia suficiente se abalanzaron sobre él y le consiguieron sujetar para evitar el fatal desenlace", apuntaron ayer portavoces del Ayuntamiento de Gijón.

El joven fue trasladado al hospital de Jove, en donde quedó ingresado en observación. Uno de los agentes sufrió heridas en una pierna durante la intervención.