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El peaje de la música relajante

La SGAE lleva a juicio a un peluquero gijonés al que pide 1.000 euros por poner melodías para la relajación en su local

Eloy Téllez, en su peluquería.

Eloy Tellez libra desde hace semanas una batalla contra la Sociedad General de Autores y Editores de España (SGAE). La institución le pide al empresario casi 1.000 euros por poner música en la peluquería que regenta desde hace años en el número 56 de la calle Magnus Blikstad. La SGAE no es la única que demanda al gijonés. Contra él también han emprendido medidas legales, acusándole de violar los derechos de autor, la Asociación de Gestión de Derechos Intelectuales (AGEDI) y la Asociación de Artistas Intérpretes y Ejecutantes (AIE). La negativa de Tellez a pagar le obliga ahora a enfrentarse a un juicio por reclamación.

El peluquero mantiene que en su negocio no pone nunca "música comercial". "A mí no tienen porqué reclamarme nada porque ellos pueden denunciar si tú estás poniendo canciones o temas de artistas que están suscritos a la Sociedad General de Autores y Editores. En mi local yo no pongo música comercial, yo pongo siempre música de relajación o sonidos de la naturaleza", argumenta Tellez haciendo hincapié en que "tengo que hacer muchos cortes de pelo para ganar ese dinero que me piden".

El empresario gijonés dice no tener "ni idea" de cómo llegó la SGAE hasta su negocio. Niega que a lo largo de estas últimas semanas hubiera recibido la visita de ningún cliente "sospechoso". "La gente que viene es de toda la vida. No hubo nadie que viniera a escuchar la música ni nada, supongo que habrá sido una denuncia anónima pero no me explico cómo han llegado desde la SGAE hasta mi después de tantos años abierto", relata Tellez en conversación con este periódico.

La SGAE acusa al peluquero de "comunicar públicamente obras y fonogramas protegidos por los derechos de propiedad intelectual". La institución argumenta que la música es "un elemento de carácter secundario para la explotación del negocio al menos desde octubre de 2011". La práctica del empresario viola, afirman los representantes de la SGAE, la ley de Propiedad Intelectual. Pero ¿cuánto costaría estar al día del pago de los citados derechos intelectuales? En las facturas enviadas al peluquero gijonés los encargados de esta institución mantienen que el uso de esa música en un local de entre los 50 y los 100 metros cuadrados tiene una tarifa de entre los 10 y 15 euros al mes. Ahora Tellez irá a juicio con la esperanza de que "al menos haya justicia".

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