EBHISA, la terminal granelera de El Musel, tiene previsto cerrar el año con un crecimiento sustancial de las toneladas que se movieron en sus instalaciones, así como un incremento del beneficio neto del ejercicio. En concreto, según los datos barajados en el consejo de administración celebrado el viernes, la evolución de los tráficos -que ha sido al alza en los últimos doce meses- permite garantizar que a cierre del ejercicio de 2015 se habrán movido por la terminal 15,5 millones de toneladas, tres millones más que en 2014. Ese año el cierre fue de 12,4 millones de toneladas, con un récord de descarga en 24 horas de 107.000 toneladas.
El beneficio neto ese año ascendió a 2,9 millones de euros, cifra que a finales de diciembre de 2015 se espera superar, alcanzando "con amplitud", los cinco millones, según se indicó en el consejo. "Esas cifras dan continuidad a la tendencia iniciada en 2012, con un tráfico de 12 millones de toneladas y un resultado neto de 2,7 millones, que en 2013 -con la adquisición de Oligsa- disminuyó a los 627.000 euros para crecer de nuevo en 2014". Al consejo se sumó el nuevo director general de la Autoridad Portuaria, José Luis Barettino, en sustitución de Gonzalo Mayo.
