El mundo de los drones es un campo abonado para seguir creciendo de manera exponencial, y por eso la colaboración e implicación de los futuros ingenieros es "fundamental". La Escuela Politécnica de Gijón albergará el próximo mes de abril las II Jornadas de Drones en el campus, una sesión que contará con conferencias, talleres y competiciones con el convencimiento de que "es el futuro y supone una gran oportunidad para los estudiantes".
Ayer tuvo lugar la presentación oficial de las jornadas a cargo de David Pello y Luis Díaz de FABLAB, quienes impartieron la conferencia "Prototipado y construcción de drones utilizando técnicas de fabricación digital". Una industria "que acaba de empezar a florecer a nivel civil, en pleno crecimiento y desarrollo a nivel profesional", destacaron los ponentes.
El futuro de los drones es de un desarrollo "enorme, difícil de predecir", que comprende múltiples aplicaciones de todo tipo, "desde procesos industriales hasta transporte, vigilancia, radares, detección de la contaminación del aire o seguridad, las posibilidades son enormes", reflexiona David Pello, quien advierte del gran potencial de los "dispositivos autónomos autopilotables, que era impensable hace unos años a nivel de precio y hoy en día, con la miniaturización de ordenadores, se han hecho mucho más asequibles".
Uno de los principales escollos a los que deberá enfrentarse el futuro de los drones es el de la regulación, que "está empezando a desarrollarse aunque aún habrá que ver muchas cosas", advierten los expertos. En España, explica Pello, ya existe una ley provisional pensada para el desarrollo de las tecnologías "pero también para integrar los dispositivos en el espacio aéreo controlado normal". En este sentido "será necesaria la integración de los dispositivos en zonas de vuelo, como ya sucede en las rutas aéreas convencionales", apunta David Pello.
Los expertos apuestan por la prudencia al hablar de las nuevas aplicaciones, porque "aún quedan algunos años hasta que podamos ver cosas como el reparto de paquetería, que es uno de los ejemplos más recurrentes", pero "lo que sí es seguro es que muchos de estos dispositivos serán autónomos, autopilotados y manejados por un sistema remoto, con tecnología integrada para poder controlarlo en el caso de perder la conexión, y tendrá mucho desarrollo en el transporte".
Los alumnos recibieron ayer una primera aproximación a un área de investigación "con unas posibilidades infinitas", y que a lo largo del mes de abril será desgranado en forma de conferencias, talleres de fabricación digital, montaje y ajuste de drones y una competición de vuelo.
