Las obras de renovación del pavimento que el Ayuntamiento ha iniciado hoy lunes a primera hora de la mañana en algunas de las principales calles de la zona centro han obligado a la Policía Local de Gijón a cortar al tráfico algunas de las principales arterias del casco urbano. No se puede circular por calles como Menéndez Valdés o San Bernardo, lo que está ocasionando numerosos atascos en el tráfico. Los agentes están obligando a los conductores que se quieren dirigir hacia zonas como la plaza del Parchís a realizar recorridos alternativos que en algunas ocasiones obligan a los ciudadanos a desplazarse hasta zonas como la calle Cabrales para poder tomar un camino alternativo. La plazuela San Miguel y el acceso al centro desde el Náutico se han convertido en dos auténticos "puntos negros" del tráfico que se recomienda evitar y en los que en las últimas horas se ha ampliado la presencia de agentes que recomiendan recorridos alternativos.

Las obras también han provocado que la Empresa Municipal de Autobuses tenga que desviar cinco de sus líneas.