El puntero de una gaita, silbatos personalizados para árbitros de fútbol o quillas adaptadas para tablas de surf. Todo ello, con un acabado perfecto listo para salir al mercado. La impresión en 3D puja fuerte, y el cierre de la primera edición del título propio de la Escuela Politécnica de Ingeniería en Experto en Impresión 3D Creativa, pionero en España, ha deparado cuatro interesantes proyectos de la mano de los seis primeros alumnos de este título.
Los estudiantes se han formado a lo largo de todo el curso para poner en marcha proyectos que son mucho más que meros trabajos finales. Porque, como explica Ramón Rubio, responsable del título, "hemos buscado que las clases estuvieran enfocadas a hacer cosas, y que además se tratara de ideas empresariales con más recorrido. Que nuestros alumnos sean capaces de presentar sus ideas con un plan de negocios, que demuestren a la gente de lo que son capaces de hacer".
Con esta filosofía y después de 230 horas de formación ayer se dieron a conocer los resultados, con una componente muy creativa porque "por encima de todo queríamos que los estudiantes trabajaran sobre algo que les motivara", apunta Rubio. Así, el surf es la pasión común de Inés Álvarez, Diego Fernández y Marc Navarrete, quienes decidieron crear con la técnica de la fabricación aditiva quillas personalizadas para tablas de surf.
Lo han hecho tras estudiar la necesidad de los surfistas de buen nivel de cambiar sus quillas en función del tipo de olas y la maniobras que desean realizar, pero que, como señalan los alumnos, "nunca llegan a ser las más adecuadas porque tienen que usar las gamas que se venden en la actualidad de forma estándar". Con su propuesta, en cambio, y gracias a la impresión 3D, pueden crear diferentes tipos de quillas listas para comercializar.
Hugo López, por su parte, dedica buena parte de su tiempo a tocar la gaita, y por eso pensó que sería interesante poder fabricar punteros con esta tecnología. La ventaja: "son más finos que los tradicionales y por lo tanto más fáciles de tocar. Además, las notas de arriba, las más difíciles de tocar, llevan un resalte que hace que sea más fácil encontrar los agujeros, y se pueden personalizar con todo tipo de adornos y filigranas que con la técnica tradicional serían mucho más complejas de hacer", resume. Y todo ello "con sonido cien por cien asturiano, no varía en nada con respecto a los punteros de madera", asevera López.
Tampoco varía el sonido de los silbatos personalizados creados por Miguel Prendes, que además de experto en impresión 3D es árbitro de fútbol. Llevando la tecnología a su campo de juego ha conseguido crear silbatos personalizados, con formas novedosas, ligeros y con la posibilidad de grabar en ellos prácticamente lo que se desee.
Y comoquiera que el acabado de las piezas en 3D aún es tosco, la idea de Alejando González se ha centrado en las técnicas de pulido y acabado, con diferentes grados de perfección, para dejarlas listas para salir al mercado.
Todas las propuestas se presentaron ayer en La Politécnica, que seguirá ofertando el título. El plazo de inscripciones para todos los interesados empieza el próximo uno de junio, con un precio de 2.750 euros. Las clases, como este curso, se celebrarán los viernes y sábados y las plazas están limitadas a 15. Será una nueva oportunidad de modela expertos del futuro.
