Las vacaciones generan incontables desplazamientos por carretera. Pero la realidad del autobús y el coche familiar está cambiando fruto de la pujanza y la ganada de adeptos de las plataformas de economía colaborativa que surgieron durante la crisis económica. Y el ejemplo está en Gijón. Con la ciudad convertida a diario en un punto de partida y llegada para numerosos turistas y asturianos que se van de vacaciones, la realidad constatable es que en muchos casos, esas rutas se hacen compartiendo vehículo. En agosto, en concreto, una media de cien viajes diarios salen o llegan a la ciudad con desconocidos compartiendo coches particulares.
Baste un ejemplo. El pasado viernes 47 personas publicaron su viaje a Madrid en una web diseñada para compartir coche, "Blablacar", la más popular en España. Casi todos los conductores consiguieron salir de Gijón con acompañantes desconocidos. Hoy martes ese mismo portal ofrece 59 salidas desde Gijón a destinos como Bilbao, Ferrol, San Sebastián, Sevilla o Madrid.
El traslado a la capital se consolida como el más solicitado en este tipo de plataformas, en las que se ofrecen posibilidades para viajar casi cada hora desde las seis de la mañana hasta las once de la noche. El precio del billete a Madrid -entre los 35 y los 60 euros tanto en autobús como en tren, frente a los 25 euros de máximo que suele costar en coche compartido-, y el tiempo de viaje que se invierte en los medios de transporte público tradicionales frente a los turismos hacen que muchos viajeros busquen alternativas en este tipo de plataformas en las que ya se pueden encontrar perfiles de usuario de todas las edades. Compartir coche ya no es una práctica de jóvenes.
Pero estas páginas no sólo sirven para que los asturianos se vayan de vacaciones. También traen turistas a Gijón y a otras localidades de Asturias. El viernes, por ejemplo, llegarán a la ciudad 63 viajes de coche compartido que saldrán de Bilbao, Burgos, Nantes o Salamanca. Entre ellos un asturiano residente en Lugo que vuelve a su cuidad natal para pasar el fin de semana y ver a la familia o una palentina que explica en su perfil que viaja hacia Asturias para unas vacaciones "exprés". La longitud del trayecto, la existencia o no de peajes y el número de personas que pueden viajar en el mismo turismo hacen que varíe el precio del viaje. Los conductores, de hecho, disponen de una franja de precios entre los que pueden optar.
La competencia entre las diferentes formas de movilidad reduce los precios. Este verano, de hecho, compañías como Iberia ofrecían plazas para el fin de semana a unos 31 euros. La puesta en funcionamiento del AVE hasta León ha reducido, además, el tiempo de viaje en tren desde Gijón hasta Madrid.
"Blablacar" asegura que a finales del año pasado tenía en Asturias 32.000 usuarios. Y el número sigue subiendo. En los cinco años que esta plataforma lleva operando en la región su público ha compartido más de 16 millones de kilómetros. "Dentro de Asturias hay usuarios en casi todas las localideades, muchos de los trayectos realizados unen puntos de la comunidad que sólo pueden realizarse en coche", señala una portavoz de la compañía. De hecho, entre los viajes que salen de Gijón cada fin de semana se encuentran desplazamientos cortos con precios que no superan en ningún caso los 10 euros y que permiten ir hasta Llanes o Luarca, por poner un ejemplo.
