El Hogar de San José recibió ayer un cheque por valor de 2.727 euros obtenidos gracias a la colaboración de Laboral Kutxa en la celebración del intento de récord mundial de escanciado simultáneo en la playa de Poniente.

La entidad bancaria participó un año más en la organización del evento con un fin solidario, a través de la venta de los vasos de sidra a los participantes en el escanciado en la arena. Por cada vaso vendido, la entidad destinó un euro al Hogar de San José. En total se han recaudado 2.727 euros, que los responsables del Hogar destinarán al "funcionamiento nomal de la casa y sus programas", explicó ayer el director, Rafael Piñera. En la actualidad, el Hogar de San José se dedica a la acogida residencial de niños, adolescentes y jóvenes de 3 a 18 años y extutelados que por diversas circunstancias no están con sus familias, con el objetivo de cuidar de ellos y trabajar en su integración social, ayudándoles a adquirir las aptitudes y actitudes necesarias para la vida autónoma. Además, también prestan atención, en horario escolar, a alumnos expulsados de los centros escolares, con más de un centenar de estudiantes beneficiados cada curso.

Y uno de los ámbitos fundamentales de atención que como ayer explicaba Piñera se quieren potenciar en los próximos años es el de el acompañamiento y orientación en la inserción laboral, a través de la empresa de inserción IMENA con el objetivo de incorporarles al mercado de trabajo y consolidar su proyecto vital. La empresa se dedica a reformas integrales y restauración de muebles antiguos.

Por eso, las ayudas como la recibida ayer "nos vienen muy bien para reforzar programas y seguir en el día a día", indicó el director. Una labor que cumplirá 75 años el año que viene y que será festejada ampliamente por quienes conforman el Hogar en la actualidad. La entidad prepara ya las actividades conmemorativas, que se compondrán de exposiciones, charlas y encuentros.