El teatro Jovellanos acogió ayer la 23ª. edición del Desfile Infantil de Disfraces. Niños y adultos de más de diez colegios y escuelas de Gijón se subieron al escenario vestidos con sus disfraces para bailar y cantar en variados números musicales.

El centro infantil San Eutiquio fue el encargado de abrir el telón con el número "Europa está de fiesta". Los niños de la escuela desfilaron por el escenario vestidos con los trajes típicos de algunos países del continente. Los alumnos del colegio Honesto Batalón tomaron el relevo con una coreografía de bailes de la clásica película de "Mary Poppins". Ataviados con los trajes de los personajes del film, criticaron "los altos niveles de contaminación". La escuela musical La Clave también fue partícipe de la fiesta con un número en el que recordaban las canciones de "Los Payasos de la Tele".

Jessica García, alumna del colegio Noega bailó junto al resto de sus compañeros el "Rock de la cárcel". "Estaba un poco nerviosa antes de salir al escenario", expresó la joven después de la actuación. La estudiante también explicó que "la idea surgió de todo el colegio" y "fueron los propios alumnos los que elaboramos los trajes".

No hace falta pertenecer a un colegio o escuela para participar en el festival de disfraces. Un grupo de amigos de Roces también se inscribió como concursante. Su número, "La charca de la rana Mariana", representó la llegada de unos curiosos animales a una charca de un parque del barrio. "Queríamos mandar un mensaje porque el parque de nuestra zona está descuidado", reivindicó la mujer que encarnaba a la rana. "Los dragones juguetones del Codema" cerraron el festejo. Los participantes recorrerán hoy por la mañana las calles del centro de la ciudad en un desfile que empieza en la plaza del Instituto.