Alrededor de un año y medio lleva enredado el Ayuntamiento de Gijón a cuenta del apoyo de la ciudad a una campaña internacional de boicot, desinversiones y sanciones contra la colonización, el apartheid y la ocupación israelí. Y lo que queda, ya que ahora la bronca política ha dado el salto del salón de plenos de la Casa Consistorial a las salas del Palacio de Justicia de La Bohemia.

Los ediles de Xixón Sí Puede e IU -con sus portavoces Mario Suárez del Fueyo y Aurelio Martín a la cabeza- formalizaban ayer en los juzgados su demanda contra el acuerdo tomado en el Pleno del pasado mes de marzo que revocaba ese boicot a Israel. Una revocación que llegó a través de una moción de urgencia tramitada por Foro y PSOE, que se quedaron solos en el salón de plenos a la hora de votarla. Del plenario se habían ido tanto XSP e IU como Ciudadanos y PP (estos dos grupos sí pedían la revocación del acuerdo) al considerar que la tramitación de esa moción por la vía de urgencia era irregular. La gestión fue avalada por el secretario del Pleno, el funcionario Miguel Ángel de Diego.

"Nuestro objetivo es garantizar que los procedimientos democráticos se respeten; lo que pasó en el Ayuntamiento de Gijón no puede volver a pasar. Por muy mayorías que sean no pueden pisotear a las minorías ni quebrar la norma para que se adecue a los intereses de cada momento", explicaba Martín (IU) a las puertas del Juzgado. "La única urgencia que había en aquel momento era la presión de determinados lobys sobre los grupos políticos por el partido de fútbol. Una vez que esa prisa dejó de existir se podía haber llevado a cualquier Pleno", matizaba Suárez del Fueyo. El partido al que hace referencia el político gijonés fue el disputado por las selecciones de España e Israel en El Molinón el 24 de marzo. El prólogo al encuentro fue una manifestación en la ciudad promovida por la plataforma "Tarjeta roja a Israel"

Los demandantes entienden que tramitar aquella moción de urgencia incumple el artículo 80 del reglamento municipal que exige presentar estas mociones una hora antes del inicio del Pleno. Esta se presentó antes de comenzar la segunda sesión plenaria, ya que hasta ahora los debates del Pleno se dividían en dos tardes. Los demandantes consideran que el Pleno es un acto único y su inicio oficial se había dado el día anterior. Para el secretario del Pleno, sin embargo, era suficiente que se hubiera cumplido "el espíritu" de la norma.

Pero aunque la demanda se centra en la forma, el fondo también es reseñable. Así lo recalcaba el abogado de los demandantes. Rafael Velasco ponía en valor que "la decisión inicial, el llamado boicot a Israel, fue declarado legal por estos mismos juzgados. Eso tiene su importancia porque una vía de urgencia para eliminar algo ilegal podría tener un pase pero para algo legal, parece un poco absurdo".

El abogado defiende que Xixón Sí Puede e IU se ven obligados a acudir a los tribunales ante "la contumacia de no haber corregido este desaguisado a través del recurso presentado ante el Pleno. Foro y PSOE (por los partidos que votaron contra aceptar ese recurso) han decidido mantener la situación como caballo de batalla. Que aquella moción fue una cacicada lo demuestra que también se ausentaron Ciudadanos y PP porque entendían que no procedía. Más claro, agua".

Este proceso judicial que ahora se inicia y que no se espera resolver antes de final de año tiene su antecedente en el acuerdo plenario de 13 de enero de 2016 sobre el "aparthaid israelí" que promovieron PSOE, Xixón Sí Puede e Izquierda Unida. El tema volvió al Pleno una y otra vez.