Dos de los acusados por un delito contra la salud pública, motivado por la venta en Gijón de heroína y cocaína, reconocieron esta mañana los hechos y aceptaron la pena de prisión a la que se enfrentaban. Una pena inferior a la prevista después de que el Ministerio Fiscal aceptase la eximente de drogadicción en ambos casos. Gracias a eso rebajó su petición de seis años de cárcel a cuatro años y nueve meses de prisión para Juan José M. M. -de 61 años, en prisión provisional y con antecedentes penales previos-, y de cuatro a tres años de cárcel para José Luis A. L., en libertad provisional. En lo que se refiera a la multa económica por este delito contra la salud pública, la Fiscalía se mantuvo en requerir los 80.000 euros iniciales.

Tanto Juan José M. M. como José Luis A. L. aceptaron los cargos esta mañana y en consecuencia la pena privativa de libertad que se les requería. En cambio, no pudo hacerlo el otro procesado en esta causa, Luis Manuel M. M., de 56 años, y hermano de otro de los acusados, debido a su estado de salud. Este hombre padece enfermedades relacionadas con su drogadicción y se encuentra internado en el hospital de Cabueñes. En su caso se suspendió "sine die" el juicio por el delito contra la salud pública. Luis Manuel M. M., igual que su hermano Juan José, también cuenta con antecedentes penales, de ahí que la Fiscalía aplique la agravante de reincidencia en ambos casos.

Los hechos de esta causa, según la Fiscalía, se remontan a una fecha anterior al mes de agosto de 2016. Los procesados venían dedicándose en la ciudad al tráfico de heroína y cocaína y según sus cálculos distribuían entre unos 200 y 500 gramos al mes de estas sustancias estupefacientes.

La primera detención de estos supuestos implicados en la red de tráfico gijonesa se produjo el pasado 28 de diciembre de 2016. Entonces, durante su registro, se le ocuparon ocho recortes de plástico que contenían 6,8 gramos de cocaína, con una pureza del 66,5% que iba a destinar a la venta, según estima el Ministerio Fiscal. Acto seguido se produjo el registro en el domicilio que compartía con su hermano, también acusado en este procedimiento.

Durante las pesquisas en la vivienda fueron hallados doce recortes de plástico con diez gramos de cocaína, con un 70,5% de pureza; un recorte con 1,2 gramos de heroína, con un 22,6% de pureza; una bolsa de plástico con 226,5 gramos de cocaína, con una pureza del 66,8%, y otra más con 404 gramos de heroína, con una pureza del 21,5%. Además de la mercancía estupefaciente se encontraron en el domicilio utensilios típicos para estas prácticas como recortes de plástico, cuchillas, tijeras y tres balanzas. También aparecieron en la vivienda 670 euros fruto de las ventas.

Al tercer acusado, otro hombre, le intervinieron 16 recortes con 9,8 gramos de heroína mientras que en el registro de su vivienda le ocuparon 7,8 gramos de heroína y 4,8 gramos de hachís, así como dos balanzas y 400 euros producto de las ventas realizadas. En suma, toda la droga requisada habría tenido un valor de 39.944,51 euros en el mercado ilegal.