El presidente de la patronal asturiana del metal, Femetal, y del cluster Metaindustry4, Guillermo Ulacia, advirtió ayer de que la transformación digital en los procesos de producción en las empresas del sector en Asturias es "verdaderamente baja", según el resultado de un estudio elaborado por el cluster, que ayer celebró su asamblea anual tras el primer año de existencia.

En la reunión se dio cuenta, entre otras cosas, del primer análisis sobre el grado de transformación digital de las empresas de la industria del metal efectuado por Metaindustry4, un estudio que revela que aunque el grado de digitalización en el área de gestión y control de procesos es alto, sin embargo la transformación de digital en los procesos de producción es baja. Esto es, "no se hacen capturas de datos, no se trabaja el Big Data, y lo más preocupante, no hay habilitadores digitales incorporados a los procesos productivos", si bien en el estudio se ha detectado un importante grado de concienciación sobre la necesidad de abordar de forma inminente la digitalización, además de una creciente preocupación por la ciberseguridad.

Tras la asamblea, celebrada en el edificio de CTIC en el Parque Científico y Tecnológico de Gijón, Metaindustry4 organizó una conferencia de Julio Martín Ramos, nombrado en junio de este año director general de Idesa, a donde se incorporó tras dirigir el centro tecnológico de Navantia, la empresa pública de construcción naval militar. Martín Ramos explicó precisamente cómo fue el proceso de transformación a una industria 4.0 de Navantia, copiando el modelo alemán de transformación digital.

El director general de Idesa recalcó que "la evolución digital nos va a desbordar; o nos sumamos al carro o nos quedamos muertos". Martín Ramos lamentó que durante muchos años en España se le diera "la espalda a la industria" priorizando los servicios, recordando la importancia de la industria para la economía y como generadora de empleos de calidad. También animó a las empresas a mejorar su competitividad mediante la digitalización, resaltando que "no es suficiente tener muy buenos productos, sino también los mejores procesos" para fabricarlos.

El director general de Idesa también resaltó que "la cuarta revolución industrial es digital y colaborativa, con integración horizontal y vertical" de procesos, pero que también es "compleja y global" implicando a la vez riesgos y nuevas oportunidades. Desde su experiencia en Navantia, apuntó que para la digitalización de la industria "la dificultad no está en las capacidades técnicas, sino en tener las ideas claras".

Por su parte, Guillermo Ulacia señaló que los tres ejes en los que está trabajando Metaindustry4, que ya cuenta con 52 empresas y organismos asociados, giran en torno a la integración de cadenas de valor globales, la gestión de capital humano y la innovación colaborativa. Destacó que "un elemento diferencial de Asturias es la alta densidad de empresa industrial y su situación geográfica que es una ventaja, porque disponemos de dos puertos, Avilés y Gijón, muy competitivos" y en ese sentido avanzó que ayer la administración autonómica aprobó una subvención para promover la creación de una terminal de carga de proyectos en los muelles de La Osa, en El Musel, donde "queremos diseñar un modelo de servicios avanzados" con un plan en el que participan 15 empresas del sector y cuyo líder es la Autoridad Portuaria de Gijón, según Ulacia. "Hemos hecho preestudios sobre las características técnicas que nos gustaría y queremos profundizar para más allá del diseño darle un plan de negocio que nos permita a todos definir si alcanzamos los objetivos o no".

Ulacia también destacó que el potencial de crecimiento del metal asturiano está "desacoplado" de la economía asturiana y nacional. Depende, por ejemplo, de que para frenar el cambio climático se potencien las energías renovables, en cuya cadena de valor hay varias empresas tractoras en Asturias.