A pocos gijoneses les pasaron desapercibidos los problemas que acabaron convirtiendo en un verdadero quebradero de cabeza para vecinos y munícipes obras públicas como la reforma de las calles Aguado y Marqués de San Esteban o el acondicionamiento del popular "kilometrín". Pero hay otros proyectos municipales que también han acabado atragantándosele al gobierno municipal de Carmen Moriyón y que han pasado más desapercibidos. Un ejemplo se puede encontrar en el polígono industrial de Los Campones, en Tremañes. Allí el equipo del edil Fernando Couto como responsable de Desarrollo Económico planteó ya a principios de 2013 la idea de construir un centro de servicios empresariales con un coste económico de casi dos millones de euros. La idea era ejecutarlo en las dos anualidades siguientes.
Ni se pudo entonces. Ni se ha podido hasta ahora. El gobierno de Foro optó hace unos meses por resolver el contrato que les vinculaba con la empresa adjudicataria, que ya ha emprendido el camino a los juzgados para solventar el conflicto. A partir de un proyecto de las arquitectas municipales Mónica Costales y María López Castro, la obra salió a licitación en noviembre de 2015 por 2.020.001,35 euros (impuestos incluidos) y un plazo de ejecución de diez meses. Tras analizarse las 14 ofertas recibidas se optó por adjudicar la obra a Oca Construcciones y Proyectos por 1.519.174 euros más 319.026 de impuestos. La Junta de Gobierno le dio el visto bueno en marzo de 2016 y el contrato se formalizó en abril. El edificio a realizar debía poner a disposición del empresariado una veintena de locales, oficinas y trasteros en régimen de alquiler y otros espacios de uso compartido como salas de reuniones o salón de actos.
No tardaron los problemas. En junio, y al hacer unas trabajos de desbroce para colocar la caseta de obra se detecta una línea de alta tensión que atraviesa la parcela y que imposibilita empezar las excavaciones. Esa y otras incidencias -la empresa habla de proyecto indefinido, errores de diseño, precios injustos, necesidad de modificaciones...-llevan a Oca a solicitar una ampliación del plazo de obras. No se llega a ningún acuerdo. De hecho, los responsables municipales de la obra plantean que el único camino para conseguir acabar el proyecto es que la constructora cambie su ritmo de trabajo. Los informes del Ayuntamiento hablan de que, a un mes del final inicial del contrato, la obra ejecutada solo alcanzaba el 17% del total. Además, se achaca a la empresa falta de colaboración para llevar la obra a buen término y se señala que el bajo nivel de ejecución tiene que ver con la falta de solvencia económica de la firma para comparar materiales o contratar a subcontratas. Y no con otras cosas.
Un análisis que se rechaza desde la empresa que, de paso, denuncia la falta de respuesta de la administración a varios de sus escritos y el hecho de que no se tengan en cuenta labores realizadas y que estaban fuera del alcance original del contrato. La decisión del Ayuntamiento en junio fue iniciar el expediente de resolución del contrato, incautar la garantía y plantear una liquidación final de 68.403 euros. El procedimiento municipal se completó en octubre y ahora, a punto de terminar el año, el rifirrafe está en manos de los jueces y Los Campones sigue sin centro de servicios para sus empresas.
Este proyecto de Los Campones es uno de las inversiones desestimadas o rescindidas de las que habló recientemente la alcaldesa, Carmen Moriyón, al presentar la situación de las inversiones municipales de los ejercicios de 2016 y 2017. Según los últimos datos del gobierno forista de las 134 obras presupuestadas para este año hay 20 terminadas, 82 en ejecución, 26 en contratación o licitación, cuatro desestimadas o rescindidas y dos en fase de proyecto. Las inversiones del año anterior eran 81. Ahora mismo están 50 finalizadas, 3 desestimadas, 25 en ejecución y 3 en contratación.
