Nada mejor para empezar el año nuevo que aprender las técnicas básicas que pueden salvar vidas. Más de 200 jóvenes asturianos se formaron ayer junto con sus padres en los talleres de iniciación a la Reanimación Cardiopulmonar (RCP) que la Fundación del Transporte Sanitario de Asturias desarrolló en el Recinto Ferial Luis Adaro de Gijón, con motivo del "Día del Transporte Sanitario en Mercaplana".

La actividad, la sexta que pone en marcha la Fundación, se desarrolla dentro de su Programa "Enseñando a salvar vidas, enseñando a salvar corazones: el valor de los primeros intervinientes", por el que ya han pasado más de 770 alumnos de infantil, primaria, secundaria, bachiller y formación profesional de varios centros educativos de toda Asturias, con el objetivo de concienciar a los más jóvenes bajo el lema "Tus Manos Pueden Salvar Vidas".

Así, los dos centenares de chavales que pasaron por Mercaplana adquirieron conciencia de la necesidad de que todo el mundo conozca maniobras preventivas de reanimación cardiopulmonar y cómo se debe actuar en caso de emergencia, porque no siempre hay un recurso sanitario al alcance.

A lo largo de la tarde se celebraron varios talleres prácticos, con respiración de boca a boca y compresiones cardíacas para suministrar aire a los pulmones y restituir la actividad del corazón del paciente. Como poco, tal y como indicaron los sanitarios en los talleres, los alumnos han de saber lo importante que resulta realizar las compresiones cardíacas, hasta la llegada de la atención sanitaria.

Además, los chicos visitaron una exposición de vehículos de transporte sanitario: desde una unidad de Soporte Vital Avanzado (UVI) y Soporte Vital Básico, a una Unidad de Apoyo Logístico, pasando por un Vehículo de Intervención Rápida (VIR), un Puesto Sanitario Avanzado, así como ambulancias de tipo convencional y colectiva. Fue el colofón divertido a una sesión que puede resultar vital.