Moscú / Oviedo,

Agencias / E. F.

Unas 250 personas fueron detenidas ayer en Moscú en manifestaciones opositoras convocadas contra la victoria del primer ministro, Vladimir Putin, en las elecciones presidenciales del domingo, según un balance policial emitido anoche. Los líderes de la oposición extraparlamentaria rusa, involucrados en las protestas, exigieron ayer la repetición de los comicios debido a lo que calificaron de «numerosas irregularidades».

Entre los detenidos figuran tres de los principales líderes de la oposición no parlamentaria: el popular bloguero Alexei Navalni; el líder del Frente de Izquierdas, Sergei Udaltsov, y el dirigente de la organización opositora Solidarnost (Solidaridad), Ilia Yashin,

Según los resultados oficiales con el escrutinio completo, Putin logró el 63,6 por ciento de los votos, muy por encima de sus rivales, ya que el comunista Gennadi Ziuganov logró el 17,18 por ciento, el empresario Mijail Projorov se hizo con el 7,98 por ciento, el nacionalista Vladimir Zhirinovski se quedó en el 6,22 por ciento y el representante de Rusia Justa, Sergei Mironov, sólo obtuvo el 3,85 por ciento.

Unas 20.000 personas, según la organización -14.000 según la Policía- participaron en un acto autorizado en la plaza Pushkin de Moscú, que posteriormente se convirtió en protesta ilegal y dio paso a las detenciones cuando los participantes se negaron a abandonar la plaza.

«Rusia sin Putin», corearon los asistentes, que tratan de revivir el espíritu contestatario nacido de las fraudulentas legislativas de diciembre y que derivó en las mayores manifestaciones desde el fin de la Unión Soviética. Uno de los asistentes, Stanislav Zhenov, aseguró que «Putin se ha nombrado presidente».

En el exterior, el proceso electoral ha sido contemplado con recelo en cuanto a su limpieza, aunque las críticas no fueron ayer demoledoras. La UE dijo que comparte el análisis de los observadores internacionales y pidió a Moscú que solucione las «deficiencias» detectadas.

La alta representante comunitaria, Catherine Ashton, destacó que los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y del Consejo de Europa constataron «deficiencias e irregularidades en las preparaciones y el desarrollo de las elecciones y que la oferta para los votantes era limitada»,

El Gobierno de EE UU instó, por su parte, a las autoridades rusas a abrir una investigación «independiente» y «creíble» de las supuestas irregularidades, al tiempo que también alabó algunos avances en materia de «transparencia» y los esfuerzos para reformar el sistema político en su conjunto.

Putin respondió a las denuncias de los observadores defendiendo la limpieza del proceso electoral. «A mi modo de ver, esta campaña electoral, a pesar de toda su dureza, estuvo libre de la suciedad de otros tiempos», dijo tras una reunión con sus rivales electorales de la que sólo estuvo ausente el comunista Ziuganov. Putin anunció que dará órdenes a la Comisión Electoral Central para que se investiguen las supuestas irregularidades que se habrían producido durante la jornada electoral del domingo.