La ministra principal escocesa, la nacionalista Nicola Sturgeon, advirtió ayer que bloquear un nuevo referéndum de independencia aprobado por el Parlamento autónomo de Escocia "fracturaría" el Reino Unido "más allá de cualquier posible reparación".

Al cierre del congreso de primavera del Partido Nacionalista Escocés (SNP), Sturgeon insistió en que promoverá un nuevo plebiscito, a pesar de que la primera ministra, Theresa May, ha avanzado que se opondrá a la celebración de una consulta antes de que se establezcan los términos de la salida británica de la Unión Europea (UE).

Sturgeon se mostró abierta a dialogar sobre la fechas de un referéndum y recalcó que vetarlo por completo minaría la "noción del Reino Unido como una asociación respetuosa entre iguales".

"Una vez estén claros los términos del 'Brexit', pero cuando todavía haya tiempo para que los escoceses puedan elegir, habrá un referéndum de independencia", declaró la líder del SNP ante los militantes de la formación en Aberdeen (norte de Escocia).

Para la dirigente nacionalista, la próxima salida del Reino Unido de la UE justifica un segundo referéndum, tras el que se celebró en septiembre de 2014, en el que el 55,3% de los votantes optaron por mantener la actual estructura del Estado.

La dirigente del SNP afirmó que si May muestra "la misma inflexibilidad" en las futuras negociaciones con Bruselas "el 'Brexit' se estrellará contra las rocas".