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Los buitres atacan a vacas de parto por la falta de carroña, avisan los ganaderos

La prohibición de dejar animales muertos en los montes priva de alimento a las aves, que causan daño al ganado

Una pareja de buitres leonados en Asturias. LNE

Los ganaderos asturianos no ganan para disgustos. A los daños del lobo, por los que están en pie de guerra, se suma ahora un problema más: los buitres. Estas aves necrófagas están atacando a vacas en parto por la falta de carroña en los montes, según denuncia el sindicato agrario COAG Asturias (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos). La ley que prohibe desde 2001 dejar animales muertos en el campo, a raíz del mal de las vacas locas, priva de alimento a los buitres, que se están acostumbrando a comer ganado para sobrevivir. "Parece que tenemos un circo y que nos crecen los enanos. Entre el lobo y esto ya no sabemos qué hacer", asegura la secretaria regional de la organización ganadera, Mercedes Cruzado.

Aunque los ataques preocupan cada vez más en el Principado, los buitres de otras comunidades autónomas están todavía más hambrientos. En Cantabria están ahora en plena polémica. Prácticamente todas las semanas muere una vaca o un ternero a causa de los picotazos que le propinan las aves carroñeras. De hecho, el Gobierno de la región vecina acaba de anunciar que revisará la normativa vigente para simplificar los trámites que ayuntamientos y juntas vecinales deben realizar si quieren solicitar una zona de protección para la alimentación de buitres.

"Atacan fundamentalmente a vacas que están a punto de parir. Están hinchadas, indefensas al no poder levantarse ni moverse y les pinchan por detrás, eso les causa una hemorragia y acaban muriendo ella y el ternero", explica José Ramón García, "Pachón", secretario general de la Unión de Campesinos de Asturias (UCA). García sostiene no obstante que su sindicato no tiene constancia de ningún caso, a diferencia de COAG. "Están muriendo vacas tanto en el Occidente como en el Oriente. Y todo porque no hay carroña", se queja Mercedes Cruzado, que apunta un aumento de la población de estas aves.

Lo cierto es que esta especie tocó fondo en 1982, cuando sólo se localizaron nueve parejas, pero en las últimas décadas ha crecido de forma sostenida y ha aumentado su área de distribución. Esto no quiere decir, no obstante, que su situación ahora sea buena.

Así lo recuerdan los ecologistas, que insisten en que la falta de carroña también está afectando a los pollos, que mueren por falta de alimento. "En otras comunidades, como Navarra, hay muchos ataques de buitres, pero aquí son ocasionales. No creo que sea necesario, de momento, hacer un control de la población", opina Xuan Balladares, portavoz de la asociación Asturias Ganadera. Aun así, Balladares no descarta que en un futuro sí lo sea: "Si el número de aves siguen creciendo, algo habrá que hacer". Lo cierto es que entre lobos, jabalíes, osos (dañan colmenas) y ahora buitres, las explotaciones asturianas ya no saben cómo levantar cabeza. Además, los agricultores y ganaderos denuncian que los pagos llegan "tarde y mal".

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