Un ganadero de Laviana, P. C. A., ha sido condenado a seis meses de prisión como autor de un delito de atentado, al haber agredido a un agente de la guardería de la Consejería de Desarrollo Rural. Es la primera vez en Asturias que una agresión a un guarda del Principado es considerada delito de atentado a la autoridad. La pena de cárcel ha quedado suspendida con la condición de que el condenado no vuelva a delinquir en un plazo de dos años. La sentencia del Juzgado de lo penal de Langreo, a la que ha tenido acceso LA NUEVA ESPAÑA, es firme, al haber manifestado al juez todas las partes en litigio su decisión de no recurrir.

El juez consideró probado que el 19 de diciembre de 2015 el ganadero condenado amenazó y agredió al agente S. S. P., cuando actuaba en su condición de guarda rural y director técnico de extinción del incendio que se había declarado entre las localidades de Soto de Agües y Villamorey, en el concejo de Sobrescobio.

Al no estar presente en aquel momento ningún bombero en el incendio (lo acompañaba un auxiliar), el guarda agredido era en aquel momento la máxima autoridad (director técnico de la extinción), circunstancia que el agresor conocía.

El guarda fue amenazado y agredido por el ganadero y presentó ante la Guardia Civil un parte de lesiones. Sufrió, a raíz de la agresión, dos erosiones a nivel frontal, una erosión en la región lateral izquierda del cuello y una contusión en el muslo izquierdo. El agredido, que tardó en sanar tres días, renunció a las acciones civiles y penales en el delito de lesiones, por lo que el condenado no abonará ni multa ni indemnización de ningún tipo. Sí pagará las costas del juicio.

En un primer momento, el ganadero iba a ser juzgado como autor de un delito leve, pero el letrado de la Unión de Sindicatos Independientes del Principado de Asturias (USIPA), Enrique Rueda, solicitó y obtuvo del juez la calificación de delito de atentado a la autoridad.

Santiago Traviesa, delegado sindical en la Junta de Personal por USIPA, resaltó su satisfacción porque por primera vez en Asturias una agresión a un guarda del Medio Natural haya tenido la consideración en un Juzgado de "atentado a un agente de la autoridad", lo que significa que "insultar o agredir a un guarda no sale gratis".

Traviesa había denunciado hace unos meses la "indefensión", la "desprotección" y el "desamparo" que viven los guardas rurales, al tener que afrontar estos juicios sin el apoyo de su empleador, el Principado. Las quejas han tenido eco en el Gobierno autonómico, pues la consejera de Desarrollo Rural, María Jesús Álvarez, ha comunicado a Traviesa que ningún guarda volvería a verse desprotegido y que el Principado prestará cobertura jurídica a sus agentes en los juicios a los que tengan que enfrentarse como consecuencia de su trabajo. "La Consejera reconoció que no es de recibo que un agente tenga que defenderse por sus propios medios" en casos como el juzgado en Langreo, indicó Traviesa.