Las obras de la primera residencia para personas discapacitadas del Occidente, que están en marcha desde el pasado noviembre en pleno casco urbano tapiego, caminan a buen término. Para finales de abril está prevista la conclusión de la estructura externa -en la imagen- y los operarios comenzarán a trabajar entonces en el interior del centro. La residencia, dependiente de la asociación Fraternidad y en la que se invertirá una cifra cercana al millón de euros, tendrá capacidad para 24 residentes, además de 6 plazas de respiro para el descanso de las familias, informa T. C.