La Rodriga (Salas),

L. VALDÉS

El futuro del polígono industrial de La Rodriga, en Salas, se debatirá en una reunión que prevén mantener hoy el alcalde, José Manuel Menéndez, y el presidente de Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Jorge Marquínez. El tema central de este encuentro es resolver un último escollo para dar luz verde a esta actuación: sus accesos. La Confederación no dio por buena la glorieta planteada inicialmente en el proyecto que conectaba el polígono con la carretera al considerar que afectaba a los corredores fluviales y el ayuntamiento tuvo que plantear nuevas alternativas.

El regidor salense aseguró ayer que «es muy prematuro dar una fecha para el inicio de las obras ya que, aunque las perspectivas son buenas, hasta que Confederación se pronuncie favorablemente hay que ser cautos». El polígono, con una superficie de 210.000 metros cuadrados, se ubica entre la carretera nacional N-634 y la AS-16 que comunica La Rodriga con Pravia. El plazo previsto para su ejecución es de 15 meses.

Salas pelea por convertirse en un lugar de interés para la instalación de nuevas empresas. El alcalde destacó que «la apertura en un futuro próximo de la autovía y las buenas dotaciones en servicios con las que cuenta el municipio le convierten en atractivo para muchos emprendedores».

Además del polígono de La Rodriga, el municipio tiene previsto extender su tejido industrial en la capital y en el parque empresarial La Espina. Si se cumplen las previsiones el paisaje de Salas se llenará pronto de grúas.