Castropol,

T. CASCUDO

La ostra del Eo ha logrado superar la frontera europea e iniciar su comercialización en el continente asiático. La empresa Acuicultura del Eo -la principal productora de este molusco en el estuario- acaba de formalizar su primer envío a China, en concreto a la región de Hong Kong. A pesar de las dificultades, por lo perecedero del producto, la ostra llegó en buen estado y resultó un éxito. Tal es así que ya hay un segundo pedido en marcha.

La responsable de marketing de la entidad, Nuria Núñez, explica que este primer intercambio comercial de ostra con el gigante asiático es fruto del trabajo de seis meses de contactos y gestiones con la agencia exportadora TomavideExport (Tmvex). «Estamos hablando de un producto muy perecedero que hay que controlar. No puede tener cambios bruscos de temperatura y hay que lograr que toda la cadena de frío se mantenga entre dos y ocho grados», precisa Núñez.

El envío de 200 kilos de ostra (aproximadamente 2.000 piezas) salió de Castropol un martes con destino Madrid. El primer trayecto fue a bordo de un camión refrigerado. En Madrid las ostras superaron el control de aduanas y embarcaron rumbo a Asia. El vuelo, vía Bangkok, llegó a Hong Kong un viernes, es decir tres días después de su salida del Eo. «Aunque parece increíble el mayor retraso lo tuvo en Madrid», cuenta Núñez. Así pues llegó con tiempo suficiente ya que el margen de consumo en perfectas condiciones que fija esta firma castropolense es de entre ocho y diez días. Cuenta Núñez que siguieron todo el viaje de las ostras con muchos nervios como «si se tratara de un hijo al que mandas de campamento».

Pero sin duda la mejor noticia no es tanto el éxito de la operación como el inicio de la aventura asiática. De hecho Acuicultura del Eo está ya en conversaciones para lograr mantener un pedido semanal de 200 kilos y poder incrementarlo progresivamente. «Es pronto para asegurar nada pero esperemos que funcione», precisa Núñez. Poco saben del consumidor final de la ostra, en suelo chino, salvo el comentario del exportador: «Nos dijeron textualmente que los resultados habían sido muy positivos. Con eso nos quedamos».

Hasta ahora el noventa por ciento de la ostra que cultivan en el Eo se comercializa en Francia. El intercambio comercial con los franceses se centra en la compraventa a granel por lo que la ostra llega al cliente final como propia. «La vendemos sin depurar con lo que en Francia entra en sus propios circuitos. Nadie sabe de donde procede», explica Núñez. Precisamente cambiar esta situación es uno de los objetivos de Acuicultura del Eo, que da salida a unas 50 toneladas anuales de ostra. Quieren que la ostra se venda depurada y lista, con su correspondiente etiqueta de origen, como ha ocurrido en la operación con China.

Herramienta fundamental en este proceso de cambio es la web www.acueo.es con la que Acuicultura del Eo intenta impulsar la venta on line. El objetivo es eliminar intermediarios y que el comprador sepa exactamente de dónde procede la ostra y confíe en su calidad. El planteamiento es sencillo pero choca con el bajo consumo de ostra en España. Si el trabajo en el mercado nacional es complejo más aún es en el mercado local. Así pues, la ostra se produce en la ensenada de La Linera pero se consume a cientos de kilómetros de distancia.

Esta Navidad volverán a poner en marcha una campaña especial de venta a través de la web. El año pasado reservaron una partida de 10.000 ostras y este año están estudiando incrementar la cifra. Los detalles se desvelarán en las próximas semanas.