Luarca (Valdés), A. M. SERRANO

El Ayuntamiento de Valdés ha agotado todos los trámites para que la XI Feria de muestras de Otur pueda celebrarse este año en el recinto ferial. La negativa de la empresa a acabar las obras y su obstrucción de los trámites para dejar sin validez el contrato es el origen de esta situación, que deja al occidente asturiano sin uno de sus principales encuentros empresariales.

El alcalde, José Modesto Vallejo, reconocio ayer «dificultades técnicas y burocráticas» para regularizar antes de mayo (la feria se celebra entre los día 11 y 13 de ese mes) la situación de las instalaciones de Otur, razón por la que el encuentro está a punto de anularse oficialmente. «Los trámites burocráticos van lentos y no podemos hacer más gestiones», explicó.

La asociación de vecinos «Santa Rita» de Otur es la parte encargada de la organización de la feria, con la que colabora de forma generosa el Ayuntamiento. Esta semana se desvincularon del proyecto, al no existir una confirmación por parte de la administración local de la disponibilidad del recinto para esas fechas.

Las obras de ampliación y mejora del recinto ferial se financiaron con cargo al Plan A y aún no están concluidas. El Ayuntamiento trata de negociar con la empresa para llegar a un acuerdo y pagar directamente a los proveedores que dejó sin cobrar la compañía adjudicataria, que, por contra, no es partidaria de ese proceso. El ejecutivo local no ha recibido la obra en su totalidad y el recinto no se puede utilizar.

El Alcalde explicó que la documentación para tramitar la rescisión del contrato con la empresa se encuentra en el tribunal del Consejo Consultivo. Modesto Vallejo criticó a los socialistas «por dejarnos como herencia esta obra y esta situación».

En la pasada edición, el encuentro se celebró con las instalaciones en obras. La situación actual es diferente porque el proyecto no está ejecutado «y si hacemos allí cualquier jornada se entiende que aceptamos la obra y, además, no tenemos cobertura de seguros».

El programa de la feria estaba cerrado y este año se dedicaba a la carne de vacuno asturiana.