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El futuro del patrimonio de Salas

El PP rechaza invertir el próximo año en el monasterio de Cornellana

El Alcalde acusa a la formación popular de "engañar a los salenses" cuando muestra preocupación por el inmueble

Interior del monasterio de Cornellana.

El gobierno central no invertirá en 2014 en el Monasterio San Juan de Cornellana (Salas). Los populares rechazaron en el Senado las enmiendas presentadas por el partido Foro Asturias (FAC, que ostenta la Alcaldía en Salas) al presupuesto nacional para incluir una obra urgente para este Bien de Interés Cultural que amenaza ruina.

Foro proponía al gobierno del Mariano Rajoy destinar 6 millones de euros a la restauración del monasterio, cuyo estado de abandono ha motivado la creación de una plataforma ciudadana que reclama actuaciones inmediatas en este conjunto que vio la luz en 1024. El alcalde de Salas, Sergio Hidalgo, criticó ayer la postura del PP, "máxime si se tiene en cuenta que el pasado diciembre la presidenta popular, Mercedes Fernández, visitó el concejo y se interesó por el estado del monasterio. Con su preocupación, Fernández sólo engaña a los salenses". El portavoz del PP local, Alberto Díaz, también pidió una pronta actuación en el edificio. Sin embargo, esta solicitud no es respaldada por el gobierno del PP en Madrid, al menos de momento.

El estado de abandono del conjunto es "creciente y cada día más alarmante", detalló Hidalgo. Pese a esta realidad y al interés que mostraron en el conjunto tiempos atrás otras administraciones, el edificio sigue sin ver una inversión ni una obra. El primer convenio de colaboración para actuar en el monsterio data de 2007, pero la obra nunca vio la luz.

La plataforma que defiende una actuación urgente asegura que parte del tejado tiene riesgo de derrumbe (de hecho una parte se ha desplomado) y que la estructura "no aguantará un invierno duro", según el portavoz del colectivo, David Valiela. Durante su presentación, la plataforma pidió una obra "pequeña pero efectiva" para evitar la ruina. En el caso del Ayuntamiento, el Alcalde apoya la propuesta, pero asegura que la administración local carece de fondos para invertir en el inmueble en estos tiempos de crisis económica. El Principado, pendiente de un presupuesto para 2014, tampoco se ha pronunciado sobre una futura obra. Ahora la administración central también rechaza una inversión millonaria. Entretanto, el edificio "amenaza ruina y está cada día peor", según los vecinos.

El PSOE (en la oposición en Salas), también reclamó en noviembre asignación de fondos para el Monasterio de Cornellana. En el caso socialista, pedían un millón de euros para iniciar la rehabilitación del conjunto.

El PP ya anuló en 2012 el convenio firmado en 2007 que destinaba 5.861.675 euros para una rehabilitación de las zonas más deterioradas. En Salas, el gobierno y plataforma siguen esperando una respuesta "antes de que se nos venga abajo", alertó Hidalgo.

En detalle

Historia

El origen del edificio es del siglo XI. Es propiedad del Arzobispado, pero se cedió al Ayuntamiento de Salas en 2001 por 30 años. Ese año, la escuela taller construyó un añadido y ocupó una parte del cenobio (la casa del cura), que utilizó como sede. La iglesia continuó con actividad.

Propuesta

En 2007 el Gobierno central y el Principado firmaron un convenio para mejorar las condiciones del edificio. El presupuesto era de 5,8 millones. Fomento financiaba la obra en un 60 por ciento del presupuesto (con cargo al 1 por ciento cultural, una figura que preveía invertir en las zonas dañadas por las obras de interés general). El Gobierno regional prometía hacer frente al 30 por ciento. Las obras (recuperar la cubierta, mejorar las pinturas del lienzo oriental y limpiar la piedra labrada de la fachada, entre otras actuaciones) llegaron a licitarse e incluso se adjudicaron, pero nunca vieron la luz.

Estado actual

El Gobierno central pretendía hacer en el monasterio un centro documental del Camino de Santiago y una hospedería. El proyecto se ha quedado sin financiación. Una plataforma de vecinos lucha desde el pasado noviembre para recuperar el proyecto o, al menos, lograr que las administraciones públicas se impliquen con una parte de la obra que fue proyectada.

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