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"Lucera", estrella del Valledor

"Sospechaba que venían dos, pero no que había un tercero", dice Justo Fernández tras el primer parto de trillizos en su ganadería

José Justo Fernández con su vaca "Lucera" y sus tres crías. DEMELSA ÁLVAREZ

Los ganaderos están acostumbrados a que de cuando en cuando una de sus vacas le sorprenda con un parto de gemelos; sin embargo, la llegada de trillizos se sale totalmente de la rutina y se dan casos en contadas ocasiones.

A sus 60 años, el allandés José Justo Fernández, del pueblo de Salcedo, asistió el pasado domingo al primer parto de trillizos en su ganadería. Cuenta en total con 117 cabezas de ganado entre vacas de leche y de carne, y ésta es la primera vez que una de sus vacas le trae tres terneros en un solo parto y "la primera vez, en al menos 60 años, que se da un caso de estos en todo el Valledor".

En muchas ocasiones, estos partos múltiples son derivados de tratamientos de fertilidad a los que se somete a la madre. Sin embargo, "Lucera" no ha recibido ni una sola inyección en sus siete años de vida, según explica su dueño, y su embarazo no ha sido el resultado de una inseminación artificial, sino de uno de los tres toros de la ganadería "Manolín".

El ganadero cuenta que en ningún momento sospechó que la vaca pudiera dar a luz a tres crías, aunque se imaginaba que por el tamaño de la barriga podría haber dos terneros. Él mismo fue el encargado de asistir al parto, que se desarrolló con normalidad sin necesidad de recurrir al veterinario. "Cuando nació el primero fui directamente a buscar al segundo porque lo sospechaba; luego, cuando le hice el reconocimiento para comprobar que no se hubiese rasgado nada, fue cuando me encontré con las patas del tercero, que además venía de culo", narra Fernández.

Cada uno de los terneros, dos hembras y un macho, venían en su propia bolsa, y cuando "salieron ya eran listos y ágiles".

A José Justo Fernández le gustaría poder criar a las dos hembras porque "su madre es muy noble y de buena raza y el toro es un gran ejemplar", subraya. No obstante, en los partos múltiples en los que hay hembras y machos existe la posibilidad de que las terneras en su época adulta no puedan concebir. Por ello, el ganadero espera recibir el resultado de unos análisis que le saquen de dudas y poder decidir ya el nombre que darles a los nuevos inquilinos de su cuadra.

Aunque la sorpresa fue mayúscula y muy agradable, José Justo Fernández reconoce que "prefiero partos de un solo ternero que sea bueno porque los múltiples pueden conllevar problemas para las madres". De hecho, "Lucera" aún se está recuperando del parto, mientras que sus crías necesitan recibir alimento extra porque el que produce su madre es insuficiente para las tres.

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