Amigos, compañeros y vecinos de José Cachafeiro Valladares le rendirán homenaje en su pueblo mañana sábado. Grandas de Salime es el territorio por el que se desvivió durante los 33 años que dedicó a la vida política municipal, catorce de ellos como alcalde, y al que vio progresar tras la llegada de la democracia. Ya jubilado, Cachafeiro disfruta en la villa grandalesa de agradables paseos y tertulias con los amigos, y critica la "desunión" que reina tras la polémica salida de José Naveiras, "Pepe el Ferreiro", del Museo Etnográfico.
-El sábado recibe un homenaje de sus vecinos, ¿cómo se siente?
-En el fondo me siento halagado porque me hagan este homenaje. Pero, por otro lado, a mí no me gustan mucho estos actos, no me gusta figurar en el candelero. Prefiero pasar desapercibido. De todas formas, me halaga que vecinos del municipio, y compañeros, me hayan preparado este reconocimiento.
-¿Cómo recuerda su etapa política?
-Con nostalgia, fue una etapa muy bonita. Hubo momentos difíciles y momentos mejores. Siempre me he sentido orgulloso de servir a mi pueblo, porque fue mi pueblo y seguirá siendo mi pueblo para toda la vida. Yo nací aquí, y moriré en Grandas de Salime.
-¿Qué papel ocupó la política municipal en su vida?
-Yo tenía una empresa, con camiones, almacén de cereales, y autoservicio. Poco a poco la política me fue absorbiendo, porque es cierto que me gustaba mucho. Fui dejando lo otro, y al final me dediqué en pleno a la cuestión política, para hacer el bien a mi pueblo y a mi municipio.
-Habla de momentos buenos y otros malos. ¿Alguno especial entre los primeros?
-Hay dos que son muy importantes para mí, muy señalados. Uno, en el año 1993, cuando Grandas de Salime fue nombrado "Pueblo ejemplar". Estuvo aquí el príncipe Felipe, hoy rey, y celebramos una gran comida con los vecinos del concejo. Con la mayor parte, porque éramos novecientos en el polideportivo. Y el otro fue ver abierta una obra que conseguimos sacar adelante, que es la residencia geriátrica, que era muy necesaria y que hoy está funcionando muy bien. También cabe destacar la construcción de la Casa de Cultura, que ya estaba hecha cuando sucedió lo de la moción de censura. Son muchas cosas que me enorgullecen, porque siempre lo hice lo mejor posible, y con ganas de hacer el bien a este municipio.
-Y de los peores momentos, ¿qué destaca?
-Tengo una cosa mala, que fue malísima. Cuando me enteré de que había un desfalco en el Ayuntamiento de Grandas de Salime, y que había sido responsabilidad del señor secretario. Yo no tuve nada que ver en el tema; es más, ni la concejala ni yo fuimos imputados por el caso. Algo quiere decir: no tuvimos culpa de ninguna clase. ¿Quién iba a pensar que el máximo responsable de una Corporación, el secretario interventor, iba a ser el que iba a meter la mano? Fue lo que más me obsesionó en mis años en el Ayuntamiento de Grandas de Salime.
-¿Cómo cambió el municipio a lo largo de sus sucesivos mandatos?
-El concejo cambió completamente desde que yo lo encontré como Alcalde por segunda vez, democráticamente, porque la primera vez estábamos en plena Transición. Era el año 1987 y estaba prácticamente todo por hacer. Se estableció el alumbrado público en todo el concejo, se arreglaron los caminos a todos los pueblos. Se consiguieron muchas obras, también la traída a Grandas de Salime? una infinidad de mejoras.
-¿Y cómo ve Grandas de Salime en la actualidad?
-Hay mucho ya hecho, en materia de infraestructuras. Pero lo que más destaco es la desunión que hay en el pueblo ahora mismo. Cuando yo entré en el Ayuntamiento de Grandas de Salime también había un poco de desunión, pero logramos estar todos a una. Ahora vuelve otra vez a haber desunión, desde la fecha en la que a Pepe el Ferreiro lo echaron del museo; a partir de ahí, comenzó este problema. Es el peor mal, ese y que no se haga nada en Grandas de Salime en materia de cultura. Porque tenemos el mayor patrimonio cultural de toda Asturias, y sobre todo del Occidente. Tenemos un castro precioso, un gran museo como es el etnográfico, el tema del oro? Hay un montón de cosas en Grandas de Salime para que el visitante pueda pasarse aquí tres o cuatro días divirtiéndose, y eso está todo muerto, no existe.
-Dígame alguna medida que tomaría si fuese Alcalde en la actualidad.
-El Ayuntamiento debería ponerse en contacto con los vecinos, con la hostelería, para hacer un programa con el que mejorar todos estos reclamos. Y que el Ayuntamiento participara económicamente, si fuera necesario, para hacer jornadas, para tomar iniciativas con objeto de potenciar Grandas de Salime; y tener presencia en los medios de comunicación y reflotar esto.
