Jueves 10. Green Valley. Dentro de la temática que hemos venido a estudiar, con la intención de ahondar en otro modelo de gestión, nos hemos dirigido a Waikato para poder conocer in situ el trabajo de la granja Marphona, negocio integral que controla la extracción, producción y venta, y centra todo su trabajo en la leche orgánica o biológica. Nos saluda en una sala de reuniones Corrie Den Haring, Director General, un hombre que parece haber sido arrancado de un marco renacentista. En seguida ejerce sobre nosotros una magnética influencia: nos impresiona tanto lo que dice cuanto cómo lo dice.
A lo largo de las cuatro horas que permanece con nosotros, realiza un análisis fantástico del sector lácteo a nivel mundial y su importancia en Nueva Zelanda. Nos aclara que su país posee un suelo volcánico que hace que la tierra sea más fértil, eso, unido al sol y el agua, propicia que Nueva Zelanda sea conocido como el país de la agricultura y la ganadería bovina.
Algunos de los aspectos más relevantes que expone Corrie son:
1. Para que una ganadería sea rentable debe poseer una cabaña bovina del orden de 400 reses.
2. Es fundamental que se alimenten de pastos en los campos verdes abonados de forma natural sin fertilizantes químicos.
3. El coste de producción es bajo por el motivo anteriormente citado, de tal manera que las 3.000 vacas de Green Valley son atendidas por 20 operarios que, a su vez, son los propietarios del ganado vacuno.
4. Producen leche fresca de alta calidad y exportan con gran éxito a los países vecinos.
5. Otro aspecto importante es el de la autoestima, es decir, piensan que tienen la mejor leche del mundo y, por lo tanto, el precio de ese producto de calidad debe ser alto. El consumidor así lo entiende y lo acepta.
6. Tienen interiorizado el concepto de que la innovación constante, la introducción de nuevas ideas, vengan de donde vengan, siempre van a ser estudiadas. Por lo tanto, no presentan un apego a la tradición muy acusado y están dispuestos a innovar constantemente.
El Director General nos intenta hacer ver que lo extraño o lo extranjero puede ser útil si se intenta comprender e incorporar y no se desprecia. Las sabias palabras de Corrie den Haring nos recuerdan a las de Miguel de Unamuno cuando decía que un padre debía combatir en sus hijos todas aquellas tendencias que a él le habían resultado perjudiciales porque, si bien ya no era posible repararlas en uno mismo, sí debía corregirlas en ellos.
Viernes 11. Parque Natural de Waitakere. Son las 9 de la mañana, el cielo está gris y por el brillo del asfalto deducimos que ha llovido. Aún así, un latido de luz aflora en nuestro interior: vamos a disfrutar por fin del Parque Natural de Waitakere.
Dante Bevacqua, nuestro espléndido guía en Nueva Zelanda, nos acompañará en la visita. La zona montañosa de Waitakere supone una barrera natural entre la ciudad de Auckland y el mar de Tasmania. Está formada por bosques de una extensión de 180 kilómetros cuadrados y su punto más alto está a 470 metros del nivel del mar. A lo largo de las dos bellísimas caminatas por la selva tropical, podemos observar la playa de Piha y su famosa Roca del león, su arena magnética debido al polvo de las partículas de hierro de un volcán cercano; helechos plateados que son el símbolo por excelencia del país; árboles Kauri, famosos por su altura y por la calidad de su madera; la cascada de Karekare, etcétera.
Por otra parte, nos parece sorprendente que a lo largo de los paseos solamente nos hayamos encontrado con un par de pájaros autóctonos, parece como si la espesura de la vegetación del bosque tropical se hubiese tragado a su fauna. Los guías nos van explicando detalles acerca de la flora y la fauna del bosque, así como algunas anécdotas interesantes: en este parque se grabaron escenas de películas importantes como las de la oscarizada "El piano", o alguna serie conocida como "Xena, la princesa guerrera" o "Hércules". Con la emoción de haber descubierto el paraíso terrenal ante tal exuberancia de sensaciones, nuestros ojos se quiebran contra los cristales en una despedida silenciosa del helecho plateado de Waitakere y de Nueva Zelanda.
Este texto ha sido elaborado por los alumnos de los institutos de Vegadeo y Navia de viaje en Nueva Zelanda
