El color de la casa, su forma o la profesión de su dueño son algunas de las pistas que deben manejar en las parroquias coañesas de Mohías y Folgueras para guiar a los visitantes. Los servicios de paquetería y correos, principalmente, deben estar atentos a cada elemento para poder llegar a su destino en localidades que han sufrido un importante crecimiento demográfico, que dejan anticuados los tradicionales sistemas para nombrar las viviendas. Ahora el Ayuntamiento ha aprobado inicialmente un proyecto para poner orden en este caos. Con nombres y números se identificarán calles y casas, con el objetivo primordial de agilizar las acciones de los servicios de emergencia y públicos. Los vecinos aplauden la iniciativa que, dicen, facilitarán saber quien es quien.
El equipo de gobierno trabaja en esta medida desde el año 2013. Entonces se decidió que, por falta de medios propios, fuese la empresa Sogepsa la encargada del proyecto, a cambio de unos 15.000 euros. La misión era dotar de un callejero a las parroquias de Mohías y Folgueras, que congregan a buena parte de la población del concejo. "Existe dificultad a la hora de ubicar los puntos o las diferentes zona para los servicios de emergencia, como policía o bomberos, y para operarios de servicios públicos, como agua, correo o telecomunicaciones. Queremos que se agilicen estas prestaciones en estas parroquias, que van tomando el perfil de urbanas, al crecer en los últimos años", explica Rosana González, la teniente de alcalde. En 2015, el proyecto fue presentado a las asociaciones de vecinos para que trabajasen con él, identificando los posibles errores. Ahora, tras la aprobación inicial, saldrá a información pública para que cualquiera pueda presentar sus alegaciones.
Las parroquias se dividirán por vías o carreteras, que llevarán el nombre "de toda la vida" o de aquello más representativo de la zona por donde transcurran. "Cada casa tendrá asignado un número, con el que será identificada a la perfección", añade González, que destaca el duro trabajo de campo realizado y la implicación de las asociaciones y alcaldes de barrio en el proyecto. "Era una eterna demanda", añade.
Juan Antonio Fernández regenta el bar de Medal, núcleo que pertenece a Mohías. Cuenta que su hijo suele encargar productos por internet, y en la dirección siempre pone "casa Gayol", como se denomina su vivienda familiar. Reconoce que el mensajero "muchas veces tiene que preguntar antes por dónde queda", lo que puede dificultar su trabajo. "Aquí se distinguen así las casas, por el nombre o por el cargo. La de fulanito el médico, o el cirujano, y todos nos enteramos", señala. Cree que la medida es una buena idea, y recuerda que en la zona antes había algo parecido, con números en las casas. "Sobre todo, será bueno para los carteros. Aunque si conocen no hay problema. Había uno, se llamaba Belarmino, que tenía todo el pueblo en la cabeza", rememora. "Pero otros sí que se lían", recalca.
A Mari Mar Sierra, que regenta una peluquería en el mismo pueblo, los paquetes le llegan a la dirección antigua, utilizando como nombre la calle "Cantalarrana". Es una de las pocas que puede utilizar estas referencias, ya que asegura que "en el pueblo se suele guiar a la gente por el color de la casa, la forma, algo que haya al lado, cualquier dato que sea de referencia". Cree que en ocasiones puede llegar a ser lioso, o precisar de demasiadas explicaciones, y también ve con buenos ojos el avance que propone el Consistorio. "Se orientará a la gente mucho mejor, es una medida que nos favorece", declara.
Los alcaldes de barrio han trabajado sobre el terreno identificando los posibles errores y subsanándolos en la medida de lo posible. José Antonio García es el alcalde de barrio de Medal, y vive en el barrio de Vega de Pindolas. "Queremos que, una vez esté publicado, los vecinos lo puedan ver y señalen los errores que se nos puedan haber pasado", subraya. En el nuevo sistema, las parcelas susceptibles de ser edificadas, que en la zona son numerosas, también llevarán un número para su identificación futura. "Yo creo que será un beneficio para todos. Si vienen a preguntar por la casa de alguien, puede que lo conozcas por otro nombre, que no sepas los apellidos, y que no puedas ayudar. Si te preguntan por la 52 de Medal, ya puedes indicar directamente", remata.
