El asalto sufrido por un vecino de Arboces en su casa a principios de mes se suma a diferentes episodios delictivos registrados en el concejo de El Franco en lo que va de año y que están provocando malestar y temor entre los vecinos. En este sentido, la Alcaldesa de El Franco, Cecilia Pérez, pide al vecindario que extreme las precauciones para evitar incidentes de este tipo: "Hay que pedir a la gente que se ande con más cuidado y que no tenga las puertas abiertas, que no sean todo lo hospitalarios que nos gusta ser y no se confíen".

Pérez recibió hace unos días al vecino asaltado mientras dormía y al que robaron una cadena de oro. Se quejó por la situación de inseguridad y la regidora trasladó su mensaje a la Delegación del Gobierno. Precisa la regidora que hasta la fecha no ha recibido más quejas de vecinos en este sentido, si bien es consciente del aumento de los robos en los últimos años.

"Estamos sufriendo una ola de visitas desagradables. El problema es que estamos muy bien situados para los amigos de lo ajeno", precisa Pérez, haciendo alusión a lo bien comunicado que está el concejo, especialmente La Caridad, que posee un enlace directo y rápido a la Autovía del Cantábrico.

El pasado febrero La Caridad sufrió ocho asaltos en viviendas unifamiliares en las inmediaciones del centro de salud. Estos incidentes se enmarcaron en la oleada de robos que sufrió la rasa costera occidental a principios de año. Tras meses de relativa calma, en junio se han registrado varios incidentes que han vuelto a alarmar a los vecinos.

Al asalto en plena noche a una casa de Arboces hay que añadir un robo a principios de mes utilizando el método del "abrazo cariñoso". En esta ocasión el botín volvió a ser una cadena de oro que llevaba al cuello la víctima.

La Guardia Civil sigue la pista de muchos de estos robos y, de hecho, a lo largo del año se han producido diferentes detenciones. La última operación se registró la semana pasada cuando, en un control rutinario, se detuvo a una pareja de rumanos. Viajaban en un furgón cargado de materiales presuntamente robados en la localidad valdesana de San Cristóbal, en la parroquia de Cadavedo.