"Los hosteleros de esta zona deben ser los abanderados de la ostra del Eo, es un producto que tienen cerca y deben de ensalzar sus valores", sostiene la cocinera María Busta, del restaurante Casa Eutimio de Lastres, que ayer impartió la última sesión del curso "Elaboraciones culinarias con ostras". Esta propuesta, en la que participaron quince cocineros de Oscos-Eo, parte del Ayuntamiento de Castropol con el objetivo de divulgar este molusco cultivado en la ría del Eo y animar a los hosteleros a trabajar con él para que gane presencia en las cartas de la comarca.
Busta explica que la ostra local es un producto de calidad con la que se trabaja bien. Está de acuerdo con que los buenos productos "cuanto más vírgenes mejor", pero también considera que apostar por elaboraciones a base de ostra da un valor añadido a los establecimientos. "Se trata de hacer algo diferente a los demás, aportar variedad y también abrir la mente del consumidor. En crudo con limón ya lo tienes y no hay que renunciar a ello, pero se puede probar", explica esta joven restauradora de Lastres. En las dos sesiones del curso enseñó a sus alumnos recetas variadas como buñuelo de ostras, ostra escabechada con guacamole u ostra gratinada al horno con espinaca.
Los ostricultores defienden esta iniciativa por la importancia que tiene que la hostelería se implique en la promoción del producto. César Gómez, de Ostrastur, explica que es algo "imprescindible" y Eduardo Martín, de Acueo, apunta a que es importante que los cocineros "pierdan el miedo" al producto. "Parece que o se toman al natural o no se toman", añade, consciente de los miedos y mitos que aún existen sobre la cocina con ostras.
Acueo lleva años trabajando en la promoción del consumo local y también fomentando que los hosteleros dispongan de este producto. Sin embargo, queda trabajo por delante ya que son muy pocos los restaurantes de la zona que disponen del molusco durante todo el año. Del otro lado están los restauradores que reconocen sus dificultades a la hora de enfrentarse a la ostra, pero se muestran dispuestos a aprender y perder sus miedos. Las dificultades para abrirlo o su carácter perecedero son algunas de las trabas que señalan a la hora de incorporar la ostra a sus cartas.
La agente de Desarrollo Local de Oscos-Eo, Inés Gil, explica que este curso busca promocionar el producto entre los hosteleros pero también que se animen a participar en unas jornadas gastronómicas de la ostra que se organizarán el año que viene como antesala del cuarto festival de la ostra de Castropol. Esta formación se desarrolla en el marco de las ayudas del Fondo Europeo Marítimo de Pesca (FEMP) y con la colaboración de la Consejería de Desarrollo Rural.
