El gobierno de Valdés baraja hacer la carretera del faro de Luarca de sentido único hacia bajo. En una fecha por determinar cerrará el paso de la vía en uno de los sentidos (a Villar) y se probará para conocer sí la propuesta es o no viable. El concejal de Obras, Ricardo García Parrondo, aspira así a recuperar un viejo proyecto socialista que haría más accesible a pie este tramo, visitado por miles de turistas al año por los paisajes de ofrece y pese al riesgo que entraña por carecer de arcén. Además, el ancho es limitado para permitir los dos sentidos de circulación.
A través de este vía se accede a Luarca desde Villar y también al cementerio y a la capilla de La Atalaya, muy visitados por los turistas. En verano y durante los periodos de vacaciones es habitual ver a muchas personas circulando por el tramo pese al riesgo que entraña. La propuesta municipal de limitar el tráfico en la carretera con sentido único se enmarca en un plan para hacer la villa más atractiva para el turista y también para el peatón. Si triunfa la propuesta de García Parrondo, en la que pensó el gobierno socialista en la época en la que fue alcalde Juan Fernández Pereiro, se haría una senda peatonal para acceder a Villar desde el paseo del muelle y sin riesgos para el peatón. "No descartamos hacer un proyecto importante para cambiar esta zona", indicó García Parrondo, quien también proyectó un aparcamiento en la parte alta del tramo, cerca del cementerio.
Un vez que la carretera del faro sólo acepte el sentido de bajada, los vehículos que circulen hacia Villar tendrán dos alternativas: la conocida como La Carril o la carretera nacional 634 que atraviesa Almuña.
La propuesta coincide con la puesta en marcha de las obras de mejora del firme del tramo. Las trabajos que se desarrollan desde el pasado lunes avanzan a buen ritmo y, si no hay problemas de última hora, concluirán esta misma semana. La inversión llega del Principado y ronda los 60.000 euros. Con estos trabajos se taparán los numerosos socavones que tenía la vía desde hace años y se mejorarán los pasos de peatones que se encuentran en Villar, cerca del colegio José García Fernández. Los últimos se elevarán para convertirlos en reductores de velocidad.
