"Nos vemos en la obligación de actuar o corremos el riesgo de quedarnos sin campo", dice el Alcalde de Tapia, Enrique Fernández, sobre el progresivo deterioro del campo de fútbol de A Xungueira por impacto de las mareas y las crecidas del río Anguileiro. El consistorio reiterará a Costas la petición de que actúe a la mayor brevedad en esta instalación deportiva, la "casa" del Real Tapia.

"Estoy harto de solicitarlo, pero voy a hacerlo una vez más", añade el Alcalde. Considera que para evitar que el mar siga socavando la base del campo es necesario construir una escollera de unos cincuenta metros. "El mar va excavando y además coincide que justo ahí hace una especie de remolino y cada vez lleva más material", explica el regidor.

Los daños son notables y, de hecho, el mar ya se llevó el trozo de terreno de la zona donde se anclan los postes de la red exterior. Esto ha provocado que dos de los postes hayan quedado en el aire y el agua ya esté a metro y medio de una de las porterías. "Cada invierno va a peor", explica el presidente de la última gestora del Real Tapia, Jesús Carbajales.

Los representantes del club han mantenido un encuentro con el regidor para trasladarle su preocupación y coinciden en la necesidad de actuar. En este sentido, precisan que la escollera construida por el consistorio tapiego en la otra orilla del cauce ha provocado un aumento de los daños, pues ahora el mar actúa con más virulencia en el flanco del campo. Por suerte, añade Carbajales, la entrada de agua por esta zona no daña al césped de A Xungueira, que siempre se recupera bien de los embates del Cantábrico. "El césped es una maravilla porque drena muy bien. Con toda la arena que metió el mar y siempre se recupera. Es muy agradecido", precisa.

En los últimos años se ha producido un avance del efecto de las mareas, que ahora con más frecuencia llegan a la zona de A Xungueira. Esto, unido al efecto del propio río Anguileiro, que desemboca en la playa, provoca infinidad de daños en este entorno. El Ayuntamiento tapiego, cansado de no obtener respuesta de los organismos competentes, actuó con sus propios medios para evitar que el mar se tragara la carretera de acceso a La Reburdia, que discurre paralela al campo de fútbol. Hizo un primer tramo de escollera en primavera de 2015 y el segundo a finales de 2016.

El Alcalde explica que la actuación en A Xungueira no sería necesaria si se llevase a cabo el plan previsto de demoler el campo y trasladarlo a una zona más segura de la villa. Aunque meses atrás hubo un intento de desbloqueo del proyecto, todo apunta a que no pueda salir adelante en el corto plazo por lo elevado de la inversión.

Sin directiva

Pese a que la situación del campo preocupa al Real Tapia, ahora lo más acuciante para el club es lograr que se conforme una directiva que tome las riendas de la entidad. La dimisión de la gestora que capitaneó la entidad desde 2014 deja en el aire el futuro de este club, fundado en 1947 y que ronda los 300 socios.

Carbajales explica que "hay gente moviéndose" de cara a conformar una nueva directiva, aunque no le gusta el planteamiento que tienen porque quieren priorizar las categorías inferiores sobre el primer equipo. "A ver si entre todos hacemos algo", precisa el presidente saliente.

La directiva saliente ha dado un plazo de días para que se resuelva la situación, de lo contrario dará de baja al club en la Real Federación de Fútbol del Principado. El tiempo apremia ya que las próximas semanas son importantes de cara a la planificación de la temporada 2018-2019.