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Alberto Menéndez

Coaliciones electorales

La derecha asturiana irá de nuevo coaligada a las elecciones generales del 26 de junio. Tanto la presidenta regional del PP, Mercedes Fernández, como la de Foro, Cristina Coto, dieron ayer el acuerdo prácticamente por cerrado. Algo esperable, ya que una vez superados los difíciles momentos del primer acercamiento entre ambas fuerzas tras casi cinco años de ruptura total, de enfrentamientos casi diarios entre dirigentes de las dos organizaciones, el camino está ahora abonado no sólo para la reedición de la coalición electoral de diciembre sino (y que es lo realmente importante) para la absorción de Foro por parte del PP dentro de no demasiado tiempo.

Foro dejó de tener sentido político cuando su fundador, Francisco Álvarez-Cascos, anunció que dejaba de ser el presidente del partido y renunció a encabezar la candidatura en las autonómicas del pasado mayo. Ése fue el principio del fin de Foro, como intuyeron muchos dirigentes de la formación que también se apartaron de la primera línea política e incluso se dieron de baja en Foro a la vez que se afiliaron de nuevo al PP. Tras el fracaso en los comicios regionales de 2015 el partido casquista probablemente hubiera desaparecido de no haberse encontrado con el inesperado apoyo de Xixón Sí Puede (la marca municipal de Podemos), que le dio la Alcaldía a la forista Carmen Moriyón cuando los tres partidos de la izquierda contaban con mayoría absoluta en Gijón.

Con la casi segura repetición del acuerdo electoral PP y Foro darán un paso más hacia la unidad de la derecha asturiana. El alejamiento de Álvarez-Cascos de la política autonómica es un dato fundamental a tener en cuenta a la hora de analizar el futuro de un proyecto que nació con el único objetivo de relanzar su figura cuando Mariano Rajoy lo descartó como candidato a la Presidencia del Principado a finales de 2010.

La derecha irá coaligada a las generales. ¿Y la izquierda?, ¿y Podemos e IU? En este caso, todavía hay mucha tela que cortar. Queda mucho por hablar y sólo dos meses para los comicios. Y, sobre todo, quedan muchas cuestiones personales por resolver.

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