La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Cien líneas

Imperios

Tal día como hoy del año 1863 se desató la decisiva batalla de Gettysburg, en Pensilvania -en EE UU claro- que marcó el declinar de los confederados y mil cosas más. Por ejemplo, el nacimiento del imperio yanqui que ahí sigue.

El ejército de la Unión estaba comandado por el mayor general George Meade y los confederados por una leyenda, el general Robert Lee.

En la primera jornada de combate lucharon 83.289 por parte unionista y 75.054 por el bando confederado. La cifra más alta alcanzada en suelo estadounidense.

Dos días después, a la desesperada, los sudistas lanzaron un terrible contraataque con 14.000 soldados al mando del mayor general George Pickett. Al final tan solo 150 soldados lograron llegar a las líneas enemigas. Tremendo.

La guerra civil americana quedó sentenciada tras Gettysburg. Conviene indicar, contra el pensamiento políticamente correcto dominante, que no luchaban los majos del norte contra los esclavistas del sur -en varios Estado norteños siguió el régimen esclavista tras la guerra- si no una concepción republicana y confederal, la del sur contra una visión imperial y del norte unionista que se impuso.

Como en la batalla de Farsalia, en Grecia, el 9 de agosto del año 48 antes de nuestra era. Julio César derrotó al ejército republicano de Pompeyo, enterró la República y abrió el tiempo del impero.

Por cierto a Lincoln y a César los asesinaron por eso. Y aún así se impuso su concepción imperial que, ojo, ahora entra en crisis con el Tea Party, Trump y tal y tal y tal.

Compartir el artículo

stats