Hay tiempo de sobra, no toca ahora hablar del candidato a la Presidencia del Principado en las elecciones de dentro de poco más de un año. Eso es lo que no se cansa de repetir el secretario de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Adrián Barbón. Y es cierto, no es éste un asunto acuciante. Pero también es verdad que las dudas sobre quién será el número uno del PSOE en los comicios de mayo de 2019 no benefician a la organización, sobre todo porque continúan mostrando bien a las claras la fuerte división interna que existe en las filas del partido que ostenta el poder en la región en estos momentos. No hay ni paz ni tregua, las espadas siguen en todo lo alto.
El sector oficialista, el sanchismo que lidera en la comunidad autónoma Adrián Barbón, no cuenta para tan destacada tarea, al margen del propio líder de la FSA, con un personaje político que, primero, tenga tirón interno y, más preocupante aún, que sea atractivo electoralmente para los asturianos en su conjunto. Hasta ahora, quienes controlan la federación habían pensado en los alcaldes de San Martín del Rey Aurelio, Enrique Fernández, y de Corvera, Iván Fernández, y en un segundo plano, en el exconsejero Pachi Blanco. Pero los tres son prácticamente unos extraños fuera de sus municipios y de su ámbito de influencia profesional y, además, sin apenas capacidad de gestión política demostrada.
Los problemas para los sanchistas asturianos en este asunto aparecen cuando comienzan a sonar algunos nombres de posibles candidatos del sector crítico, nombres mucho más conocidos y con gran experiencia en las labores de Gobierno, tal como el actual consejero de la Presidencia, Guillermo Fernández, o, sobre todo, el titular de Fomento y durante muchos años portavoz socialista en la Junta General, Fernando Lastra.
Adrián Barbón dijo, incluso antes de ser elegido secretario general de la FSA, que él no encabezaría la lista autonómica en las elecciones del próximo año. No obstante, tras los últimos acontecimientos, entre el sanchismo asturiano ya han comenzado a surgir voces reclamando que rectifique y se presente a las primarias socialistas para evitar sustos internos no deseados. De no ser así, de mantener su promesa, hay dirigentes que piensan que otra alternativa "ganadora" en la propia FSA sería la de la actual vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, aunque esta opción implicaría que los socialistas asturianos perderían influencia a escala nacional, aunque fuera sólo nominalmente.
El proceso de elección de candidato al Principado acaba de empezar. Habrá muchas idas y venidas. Por ejemplo, en el sector crítico, entre los hasta ahora considerados javieristas (partidarios del presidente del Principado, Javier Fernández) verían con muy buenos ojos que la candidata a ocupar el despacho de la calle Suárez de la Riva fuera la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo. Otra cosa es que ella esté dispuesta a pugnar por la nominación.
