Cangas, Ramón DÍAZ

Parques Nacionales desconoce el número de ganaderos que aprovechan pastos en los Picos de Europa. Tampoco sabe cuántos de esos ganaderos están dados de alta en el régimen especial agrario, ni el censo ganadero del parque de los Picos. Lo ha reconocido el director del parque, Rodrigo Suárez Robledano, en una respuesta que envió hace unos meses, por escrito, a la Asociación para la Defensa Jurídica del Medio Ambiente, Ulex. Este colectivo señaló ayer que el hecho de que Parques desconozca estos datos demuestra que los controles del lobo en los Picos se realizan «sin criterio alguno, ni poblacional ni de daños».

Ulex había preguntado a Suárez Robledano sobre el número de ganaderos que acceden a los pastizales de verano del parque nacional, así como sobre la carga ganadera que soporta el espacio natural. El director del parque sólo aporta un dato: el número de animales que pastan en la zona canguesa de los Picos, más de 6.000. Pero reconoce que carece de datos sobre los demás concejos del parque: Amieva, Cabrales, Onís y Peñamellera Baja. Suárez Robledano se excusa con el argumento de que el parque no es la «unidad gestora» de los montes de utilidad pública de los Picos.

Añade que sólo un cruce de los datos del órgano gestor de los montes de utilidad pública (la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural) y la Tesorería de la Seguridad Social podría aclarar el número de personas que suben animales a los pastizales de verano de los Picos y, de éstos, cuántos son ganaderos a título principal. Pero Suárez robledano va aún más allá y le pide a Ulex los datos que este colectivo conservacionista ha solicitado, si es que los consigue. «Esta dirección no va a elaborar datos que superen la información que elabora para su gestión ordinaria; no obstante, agradecerá al solicitante que, si dispone de ellos, los obtiene o elabora, los ponga a su disposición», señala el director del parque nacional.

Ulex mantiene que el hecho de que Parques Nacionales desconozca el número de animales de los Picos implica que tampoco puede conocer la verdadera incidencia de los daños que provoca el lobo en las cabañas ganaderas. «No son los mismo 25 bajas en una cabaña de 5.000 animales que en otra de 50.000», señaló Alfredo Menéndez, presidente de Ulex, quien afirma que los controles del lobo se están ejecutando, por lo tanto, «a ciegas».

Suárez Robledano sí contesta a una pregunta: el número de expedientes de responsabilidad patrimonial por daños de lobo a ganaderos en la zona asturiana del parque, entre el 15 de junio y el 31 de octubre del año pasado, fue de 25. «¿Es mucho? Sólo sabiendo el número de animales se podría responder a esta pregunta y, por lo tanto, se podría decidir si son necesarios los controles de población», señaló Menéndez.